La capitanía es "uno de los aspectos importantes a tratar", en palabras de Pepe Mel, durante la concentración de Vilalba (7-11 de agosto). Un cargo que parece que quedará vacante si se certifica la marcha de Álex Bergantiños, tras las ya confirmadas salidas de Lux y Laure. Durante la primera semana en la localidad luguesa los futbolistas, técnicos y dirigentes decidirán quién lucirá el brazalete, algo que "ilusiona" a Pedro Mosquera. "A cualquier persona de A Coruña que le digan que puede ser el capitán del primer equipo le hace una ilusión enorme", reconoció el centrocampista de A Gaiteira ayer en Abegondo.

Parece, sin duda, el mejor colocado para convertirse en el portador del brazalete, pero "pero todavía no se sabe, no se ha tratado ese tema", reconoció. Representante del fútbol local, a pesar de que se marchó a Madrid de niño, y ser, posiblemente, el único coruñés en el primer equipo blanquiazul lo convierten en el principal candidato a ser el primer representante del equipo sobre el césped y de sus compañeros ante los dirigentes. "Hay compañeros que llevan más tiempo que yo y no sé cómo va a ser", dijo en referencia al proceso.

Ahora la antigüedad tiene menos peso que antes. Importante es la decisión de los futbolistas -es lo que tiene más valor habitualmente-, pero también la del entrenador y de los directivos. El técnico, porque quiere tener en el campo a un hombre con personalidad, pero al mismo tiempo conciliador; la directiva suele buscar a alguien de confianza y que no genere demasiados problemas. Pero sobre todo en lo que todas las partes coinciden es en estar representados por un hombre con personalidad, que ofrezca confianza y que muestre compromiso.

Si Álex acaba saliendo, el nombre propio parece el de Pedro Mosquera. Será uno de los hombres importantes para Pepe Mel este año. De hecho ya ejerce de capitán -o de anfitrión- en el trato con Fede Valverde. "Estoy intentando ayudarle en lo que puedo. Ayer -jueves- le di mi teléfono móvil, es muy buen chaval y se va a adaptar muy bien", comentó el de A Gaiteira. También para el técnico tiene un carisma especial. "El año pasado no estaba contando mucho para Garitano y Pepe Mel depositó la confianza en mí y en esos partidos di mi mejor versión", reconoció el futbolista coruñés.