Antepenúltimo con solo 16 puntos al cierre de la primera vuelta, el Deportivo no está para tirar ningún partido de antemano. Tampoco el del Santiago Bernabéu, donde el domingo (16.15 horas) cruzará el ecuador del campeonato ante un rival en plena crisis de resultados, especialmente en casa. Es un compromiso de extrema dificultad, pero no es imposible sumar allí, como ya demostraron esta temporada cinco clubes, entre ellos Levante y Betis, dos equipos de un potencial en teoría parejo al del Dépor. "La salvación pasa por ir al Bernabéu. No se puede saltar -aseguró ayer Lucas Pérez en Abegondo-. Allí han puntuado equipos de nuestra liga, como se suele decir".

Sumar como sea es lo que necesita el Deportivo después de una "primera vuelta mala" en la que los resultados no han acompañado, ni en casa ni fuera. Solo una victoria a domicilio, en Las Palmas (1-3), ha logrado el equipo blanquiazul esta temporada, en la que únicamente fue capaz de arañar seis puntos lejos de Riazor. Sin embargo, la plantilla se arma de valor de cara al desplazamiento a Chamartín, una parada irrenunciable tal y como está de necesitado el Dépor. Salir vivo de uno de los estadios más difíciles del mundo sería la mejor manera de iniciar la reacción de cara al calendario que seguirá después, con rivales de un potencial similar al coruñés. "Lo que tenemos que hacer es ir al Bernabéu a intentar ganar, puntuar, y sacar algo positivo", sostiene el atacante coruñés, que descarta la opción de salir derrotados de antemano. "¿Qué hacemos? ¿No cogemos el avión? Si vamos así, mal vamos", añadió.

Está convencido de que queda tiempo suficiente para que la plantilla demuestre que no es una de las tres peores de Primera. Para conseguirlo, la "unión" va a a ser clave, a juicio de Lucas. "Queda una vuelta entera. Sabemos que lo podemos hacer. Entre todos juntos, con la unión, es como se consigue. Estamos en el momento de salir. Hay que confiar, animarnos y no meter más mierda dentro. Ya hay suficiente", recomendó el de Monelos. "La primera vuelta fue mala, ¿por qué no la segunda la podemos hacer como aquella primera vuelta con Víctor?", recordó sobre el gran arranque con Sánchez del Amo hace dos campañas.

En este momento de especial dificultad para el Dépor, que está dos puntos por debajo de los puestos de salvación, Lucas apela más que nunca a la unidad, aunque comprende el desencanto de los aficionados por la mala marcha del equipo. "Lo entiendo. Ellos pagan su abono y la única manera de decir su opinión es en los partidos. Siempre nos apoyan mucho. Ven que el equipo no va, que las cosas no salen y yo los entiendo, porque el primer aficionado al fútbol soy yo, y yo también estaría disgustado, lógicamente. Como en este caso yo lo veo desde dentro y sé la capacidad que tiene el equipo y la capacidad de mis compañeros, pues es una pena que la gente no lo sepa, no vea lo que hay dentro y lo que la gente también sufre, porque nadie quiere fallar ni jugar mal", argumentó el atacante coruñés, que recalcó la importancia de "estar todos juntos". "Lo único que les puedo pedir es estar todos juntos, que es como se puede sacar. Queda toda una vuelta. Tenemos que apoyarnos y todos unidos es como se saca", insistió.

La pasada campaña el Dépor estuvo muy cerca de puntuar en Chamartín en un partido condicionado por la actuación del colegiado Jaime Latre, que perdonó la expulsión a Danilo por una entrada a Babel cuando el conjunto entonces dirigido por Gaizka Garitano vencía 1-2. Los dos goles de Joselu en la segunda parte hicieron al equipo coruñés llegar con ventaja a la recta final, pero los tantos de Mariano y Sergio Ramos in extremis acabaron por completar la remontada merengue.

Ahora, ya con Lucas de vuelta en el Deportivo, el conjunto coruñés vuelve a visitar el Bernabéu con la obligación de plantar cara al Madrid y hacer todo lo posible por regresar con un resultado positivo. "Es muy difícil predecir este tipo de encuentros. Incluso haciéndolo bien, hay partidos que te vas de allí con cinco (goles)", concluye el coruñés, que hace autocrítica tanto individual como grupal: "No estoy contento ni a nivel personal ni en el colectivo. Tenemos que mejorar mucho no, muchísimo, para evitar el descenso".