Clarence Seedorf dedicó buena parte del entrenamiento de ayer en Abegondo, el penúltimo antes del partido de mañana contra el Betis, a insistir en aspectos tácticos que quiere que sus futbolistas tengan claros de cara a su primer encuentro al frente del Deportivo. Para ello, dividió a su plantilla en dos formaciones de once jugadores. En el teórico equipo titular introdujo novedades en todas las líneas, salvo en la portería, una demarcación muy cuestionada en la que, según los ensayos de ayer, el nuevo técnico mantendría su confianza en Rubén. Completan ese posible once Juanfran, Albentosa, Bóveda, Luisinho, Valverde, Krohn-Dehli, Lucas, Adrián, Bakkali y Andone. Una apuesta con cambios llamativos, sobre todo por la presencia de Bóveda como central junto a Albentosa; la de Valverde en el doble pivote con Krohn-Dehli; y la de Bakkali en la banda izquierda del ataque.

Si cumple con estos planes y consuma esa pequeña revolución, Seedorf dejaría en el banquillo a futbolistas importantes como Fabian Schär, Guilherme dos Santos o Celso Borges, quien vuelve tras sanción. Los tres venían siendo titulares habitualmente, tanto con Pepe Mel al frente como luego durante la etapa de Cristóbal Parralo en el banquillo. Carles Gil y Fede Cartabia, titulares en Anoeta, también perderían su plaza en el once, según las pruebas del holandés.

A solo dos días vista de su estreno ante el Betis, el entrenador dibujó un 4-2-3-1 en el que situó a Eneko Bóveda como central izquierdo al lado de Raúl Albentosa para cubrir la baja del lesionado Sidnei Rechel, que ultima su recuperación y no estará disponible para el encuentro de mañana. Juanfran, a quien Cristóbal dejó en el banquillo la pasada jornada ante la Real Sociedad, recuperaría su puesto en el lateral izquierdo.

En el centro del campo repetiría de inicio Krohn-Dehli, tras su amargo estreno con el Dépor en Anoeta Krohn-DehliDépor Anoeta, pero en esta ocasión su acompañante en el doble pivote no sería Guilherme sino Fede Valverde. El brasileño ha sido titular en todos los encuentros, salvo el de la jornada trece frente al Athletic, en el que no pudo competir por acumulación de amarillas. Menos presencia hasta ahora ha tenido el uruguayo, quien solo formó diez veces como titular. Durante los ensayos de ayer el joven cedido por el Madrid fue el encargado de iniciar las transiciones ofensivas, partiendo desde una posición más retrasada que la de Krohn-Dehli. En cuanto al ataque, Lucas partiría desde la banda derecha, con Bakkali en la izquierda y Adrián en la mediapunta por detrás de Florin Andone, que regresa al equipo tras perderse por sanción la visita a Anoeta.

Con el rumano se paró varias veces Seedorf para darle consejos de forma individualizada. El técnico volvió a estar muy encima de sus futbolistas, realizando continuas correcciones en su afán por moldear un nuevo Dépor más junto, intenso y sólido. Además de reanimar a la plantilla, su principal objetivo desde su llegada ha sido dotar a sus jugadores de las herramientas necesarias para frenar la sangría de tantos encajados que convierten al equipo coruñés en el más goleado de Primera (51 en 22 partidos).

Valerio Fiori, el segundo de Seedorf, fue el encargado de supervisar en primer lugar los movimientos de los teóricos titulares, que practicaron transiciones ofensivas sin oposición en el campo 3. Mientras, el holandés se quedó en el campo 2 para hacer un trabajo similar con los siguientes futbolistas de campo: Gerard Valentín, Schär, Mosquera, Navarro, Guilherme, Borges, Carles Gil, Fede Cartabia, Çolak y Borja Valle. A continuación, ambas formaciones coincidieron en el campo 3 para practicar frente a frente, ya con rival. En el tramo final de los ejercicios tácticos, durante apenas diez minutos, Seedorf hizo variaciones en los dos equipos para juntar en el mismo once a tres pivotes: Valverde, Krohn-Dehli y Borges. Fue un entrenamiento intenso y largo, con hora y media sobre el césped, más media hora previa de sesión de vídeo.