La cuenta atrás para el partido más importante de la temporada del Deportivo Abanca comenzó ayer por la tarde en Abegondo, donde las jugadoras de Manu Sánchez hicieron piña y completaron el primer entrenamiento orientado a preparar el trascendental duelo del domingo (17.00 horas) en Ponte dos Brozos contra el Oviedo Moderno, su inmediato perseguidor en lo más alto del grupo 1 de la Segunda División femenina y el único que puede arrebatarle el título y, por consiguiente, el derecho a pelear por el ascenso a la máxima categoría nacional. Primero contra segundo, separados solo por un punto. En la primera vuelta el Dépor ya fue capaz de vencer a las asturianas (0-1) y el domingo, en Arteixo, buscará de nuevo el triunfo pese a que el empate le basta para asegurar el liderato.

"No somos un equipo que especule con el resultado y no lo vamos a hacer ahora -asegura el técnico blanquiazul, Manu Sánchez-. Caeríamos en un error si variáramos algo de lo que hemos hecho durante todo el año. Con todo el respeto al rival, salimos siempre desde el minuto uno a por el equipo que tenemos delante y eso es lo que vamos a hacer". Está convencido de la capacidad de sus jugadoras para superar esta "final". "Es la semana más importante de la temporada. Así de injusta es esta competición, que todo el trabajo del año te lo juegas en un partido", argumenta.

Nuria, la última futbolista en abandonar la enfermería, se incorporó la semana pasada a los entrenamientos, así que Manu Sánchez tiene a su disposición a su plantilla al completo, 22 futbolistas, de las que saldrá la lista de 16 elegidas para enfrentarse al Oviedo. No es una batalla más, sino la definitiva, y eso se nota en el día a día. "El grado de ansiedad irá subiendo según avance la semana. Eso no es malo porque es un indicador de la importancia del partido y eso te prepara tanto la mente como el cuerpo. El equipo está preparado para un partido como este", afirma el técnico.

Después de recibir a las asturianas el Dépor aún tendrá por delante tres jornadas más -Sporting de Gijón, derbi coruñés ante el Victoria y Friol- pero Sánchez tiene claro que el campeón se decidirá el domingo: "La competición ha demostrado lo que es. Esto es una liga entre dos equipos (Dépor y Oviedo). Aunque no sea matemáticamente, el equipo que venza en este partido es el que va a ganar la liga".

Todo el deportivismo está muy pendiente de la brillante temporada de las blanquiazules, líderes con 64 puntos y todavía invictas tras haber cedido solo un empate, ante el Monte (2-2). Unos mil aficionados llenarán Ponte dos Brozos para alentar al Dépor Abanca en busca del título y el billete para el play off. Se barajó la posibilidad de trasladar el encuentro a Abegondo o incluso Riazor, pero "las chicas están acostumbradas a jugar en Arteixo y, además, el Concello siempre se ha portado fenomenal, así que no sería muy elegante cambiar".

El domingo habrá más público que nunca y eso aumenta la "responsabilidad". "Jugando en casa y viendo cómo está respondiendo la afición, creo que tenemos todo de cara para sacar lo mejor de nosotros". Con esa ayuda extra el cuadro coruñés confía en volver a superar a un rival "muy sólido" como el Oviedo Moderno, el equipo menos goleado con solo siete tantos en contra, dos menos que el Dépor: "Lo basan todo en su seguridad atrás. Es su principal fortaleza".