El Fabril regresa del Francisco de la Hera con una sensación agridulce. De la posible debacle tras un 2-0 rápido y la superioridad local del inicio a la esperanza que le da un resultado que se puede remontar el sábado próximo en Abegondo. El equipo de Gustavo Munúa fue capaz de rehacerse de su mal comienzo y se creció cuando el rival se quedó con un jugador menos antes de cumplirse la media hora de juego. Marcó rápido y la hora siguiente fue un acoso y derribo sin premio en el que el meta local, Manu García, se convirtió en el héroe de la numantina resistencia del Extremadura.
El inicio del encuentro resultó una pesadilla para el Fabril, que, superado el cuarto de hora, ya perdía por 2-0. El entusiasmo y frescura en la salida del equipo azulgrana contrastó con la puesta en escena del filial deportivista, timorato y superado. Golpeó primero Enric Gallego al aprovechar un despiste defensivo fabrilista. Y Carlos Valverde hizo el segundo tanto del Extremadura después de rematar un buen centro de Jairo, que volvió loco a Blas, desde la izquierda. Entre ambos goles el propio Jairo pudo marcar para los locales, aunque también pudo empatar el Fabril en un remate de Raúl que sacó Enric Gallego sobre la línea justo antes del 2-0.
La mejoría del Fabril, que dispuso de una ocasión de Romay, se incentivó con la expulsión del central local Borja García, que vio dos veces la tarjeta amarilla en menos de cinco minutos y dejó a su equipo con un hombre menos más de una hora. Juan Sabas, técnico local, incorporó a un central por el autor del segundo gol y nada más entrar Lomotey al terreno de juego, Uxío estableció el 2-1. Fue tras un error del lateral Aitor. Blas puso el centro desde la derecha y el ariete fabrilista se anticipó a la zaga local y sorprendió a Manu García con su remate al primer palo.
Todo había cambiado para el Fabril. De estar contra las cuerdas a verse fuerte, superior y con un rival mermado. Fue desde entonces una ofensiva sin tregua, con momentos fluidos y otros más espesos para sorprender al Extremadura, que se defendió con mucho oficio y múltiples ayudas.
El dominio fue casi total, aunque el equipo local pudo dar la puntilla gracias al excelente trabajo de Enric Gallego. Los pupilos de Munúa, con pocos espacios en el área local, lo intentaron con lanzamientos lejanos, como uno de Borja Galán y otro de Gaizka Martínez, tras una trabajada acción de ataque, que detuvo el portero en dos tiempos. No encontró rematador un centro de Luis que se paseó por el área local.
Totalmente volcado el Fabril en los minutos locales, perdonó su rival una contra muy clara con un remate de Álex Díaz a las nubes. En el tiempo añadido llegó la opción más clara para lograr el 2-2. Bicho recogió un balón suelto en la frontal del área grande y Manu García respondió con una espectacular parada y así convertirse en el héroe de la titánica resistencia del equipo azulgrana.
