Quedan, ya no pocos días, sino pocas horas, para que empiece el Xacobeo, un acontecimiento en el que la Xunta tiene puestas "muchísimas esperanzas", según explicó ayer el conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda. "Todos echamos una mano en lo que sea preciso para que la cosa funcione desde el primer día perfectamente", añadió antes de presentar el Plan de Protección Civil de Atención al Peregrino 2010. Alrededor de un millar de personas, según datos facilitados por el conselleiro, echarán algo más que una mano. En realidad, cederán su tiempo de ocio, como el titular de Presidencia resaltó, para ejercer como ángeles de la guardia de los peregrinos a lo largo de los concellos por los que discurre el Camino de Santiago en Galicia.

Los voluntarios de Protección Civil de 86 agrupaciones de la comunidad se encargarán de que los "millares de personas" que escojan realizar cualquiera de los caminos que llevan a Santiago logren llegar a su meta "sin sobresaltos" y "puedan disfrutar de una experiencia enriquecedora".

De ese modo, explicó el titular de Presidencia, "volverán a su lugar de origen hablando bien y con una experiencia enriquecedora". En ese sentido, recordó a los voluntarios de Protección Civil que ellos serán "el espejo en el que se va a reflejar la labor de Galicia como anfitriones". "Las personas a las que primero van a acudir miles de personas y la imagen que se van a llevar de Galicia tendrán que ver con el trato" que les dispense este colectivo, subrayó, para añadir que debe ser, como en años precedentes, "riguroso, desinteresado y eficaz".

La principal "novedad" de este año con respecto a los anteriores jubileos será el énfasis en la "prevención", resaltó el conselleiro, El objetivo del plan presentado ayer en Santiago, cuyo operativo estará coordinado por el Centro de Atención ás Emerxencias 112, es que los voluntarios proporcionen a los peregrinos atención "continua in situ en situaciones de emergencia en las que precisen ayuda" y colaborar en actos en los que se prevea una gran concentración de personas, especialmente en Santiago y en concreto en el área de la catedral y plazas anexas.

A los voluntarios de Protección Civil se les ha asignado encargarse de la "vigilancia" de las diferentes rutas jacobeas y de informar a los peregrinos y atenderlos. Asimismo deberán estar en contacto permanente con el 112 para dar cuenta de las incidencias y funcionarán por parejas. Protección Civil también se encargará de comprobar el estado de conservación de los caminos y de informar sobre las deficiencias que detecten. Para ello, la Xunta elevó de 300.000 a 800.000 euros el presupuesto de Protección Civil para el año que viene.

No obstante, la Xunta también se ha preocupado de dejar claro qué no harán los voluntarios de estas agrupaciones y para ello se hará una campaña de comunicación fuera de Galicia. Así, entre las labores del colectivo no está la de transportar peregrinos o sus equipajes, limpiar o reparar los caminos, hacerse cargo de las monturas de los peregrinos o acompañarlos si tienen la suficiente autonomía. Además, aunque sí se ocuparán de las lesiones leves, derivarán a los viajeros a los puntos de atención sanitaria más próximos si consideran que el problema excede su preparación.