Siete meses después del paso por Galicia de la llamada "tormenta perfecta", la ciclogénesis explosiva bautizada como Xynthia, otro fenómeno atmosférico de las mismas características llegará a las costas de la comunidad este fin de semana. Entre el 25 y el 28 de febrero media España tembló ante el anuncio del paso de aquel temporal, pero para el puente del Pilar se espera otro parecido o incluso peor, ya que para los expertos será todavía más virulento, hasta el punto de que lo denominan como bombogénesis explosiva, el término que emplean los científicos para designar a una ciclogénesis extrema. Es decir, la tormenta perfecta llevada a su máximo grado.

Miembros del departamento de Meteorología de la Universidad de Berlín la han denominado Paula y, si se cumplen las previsiones, la borrasca pasará a la historia como una de las más intensas del Atlántico en los últimos años. La web Cazatormentas.net asegura que la bajada de presión será muy importante en tan sólo 24 horas. Los efectos serán días de lluvias y vientos muy intensos durante el puente. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) habla sin ambages de cuatro días consecutivos de lluvias entre el sábado y el martes. La probabilidad media de las tormentas es del 80%, y las temperaturas máximas bajarán unos cinco grados para el sábado respecto al viernes.

La borrasca perfecta se está formando en el Atlántico al unirse dos perturbaciones, una de superficie con otra situada en las capas altas de la atmósfera, y que traerá vientos de más de 120 kilómetros por hora a Asturias, Cantabria, Galicia, País Vasco y las cordilleras cantábrica, central, ibérica y pirenaica, según las previsiones de la Aemet. La tormenta se ha generado al oeste de Madeira y en ella confluyen una serie de fenómenos que normalmente no coinciden. Se unirán una borrasca que está en superficie, de capas bajas, que tiene una energía potente de aire cálido y húmedo, con otra, que los meteorólogos llaman "vaguada".

La borrasca se desplazará hacia el Cantábrico por el noroeste de la península. En Canarias podrán alcanzarse rachas de 100 a 120 kilómetros por hora y en la mitad norte peninsular los vientos superarán los 100. En las zonas marítimas de Finisterre y oeste del Cantábrico habrá temporal duro o muy duro y mar muy gruesa con olas de varios metros. La situación se mantendrá desde la madrugada del sábado hasta la del domingo.