Empieza la cuenta atrás para la fusión de los centros gallegos en el exterior. Ese mismo año se producirán las primeras alianzas entre entidades de la colectividad gallega. La avanzada edad de los socios y las dificultades económicas para mantener la cartera de servicios ha llevado a los representantes de las entidades gallegas en el exterior a dar los primeros pasos hacia las alianzas. El secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, adelantó ayer que las negociaciones para la fusión en los centros gallegos de Cuba y Cataluña están más avanzadas y confía en obtener resultados este año.

La Lei de Galeguidade promovida por la Xunta constata que algunas entidades en el exterior podrían verse abocadas "en breve" al cierre si no se toman medidas. Según destacó Rodríguez Miranda en una entrevista a Europa Press, la normativa impulsada por el Ejecutivo gallego pone sobre la mesa "posibles soluciones" para evitar que los emigrantes se vean privados de entidades que, reiteró, juegan un papel "muy importante" en la prestación de servicios y que en algunos casos, sobre todo en Argentina y Uruguay, sufren un problema de "fragmentación".

Tras aprovechar su primera etapa en la Secretaría de Emigración para viajar por España y Europa, con contactos con la diáspora, Rodríguez Miranda prevé realizar a principios de marzo su primer viaje institucional a Argentina y Uruguay. En estos países prevé reunirse con la colectividad, pero también aprovechará para contactar con los responsables de la gestión del hospital gallego de Buenos Aires, "intervenido por el Gobierno argentino", y comprobar cuál es su estado actual.

Sobre la reforma del voto emigrante pactada por PP y PSOE en 2010, el secretario de Emigración defiende la necesidad de una nueva modificación debido a la caída de la participación que supuso la implantación del voto rogado. Ese descenso de las papeletas procedentes del exterior refleja, concluye Miranda, que la reforma del voto exterior "no fue la más adecuada".