Más de 300 conductores son sorprendidos cada día por los radares fijos que vigilan las carreteras gallegas pese a que todos están señalizados. Si los hay que pisan más de la cuenta el acelerador pese a que Tráfico avisa de su presencia con carteles, cuántos conductores infringirán las normas cuando nadie les ve. O al menos cuando así lo creen. Los 60 coches camuflados de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia, una veintena de ellos provistos de radar, no despiertan las sospechas de los infractores al volante. Son turismos de gama media-alta, de diferentes marcas y colores que recorren a diario la red viaria de la comunidad para evitar que el conductor llegue a identificarlos. Hasta un total de 105.521 automovilistas fueron denunciados el año pasado en Galicia tras ser sorprendidos por exceso de velocidad por alguno de los vehículos civiles provistos de radar: una media de 290 cada día. O lo que es lo mismo, doce cada hora. Otros 12.742 fueron multados por infracciones graves como utilizar el teléfono móvil, viajar sin cinturón de seguridad, adelantar de manera indebida o invadir el lado izquierdo de la calzada. En total, 118.263 conductores pillados in fraganti por los coches camuflados de Tráfico en las carreteras gallegas, lo que supone una media de 324 cada día.

En el conjunto de Galicia, las infracciones detectadas por estos vehículos el año pasado disminuyeron cerca de un 11,5%, según el balance de la Agrupación de la Guardia Civil de Tráfico en Galicia.

En el caso de las denuncias de los coches desprovistos de radar, A Coruña fue la excepción, ya que fue la única provincia en la que aumentaron las sanciones: casi un 9% al pasar de las 6.046 de 2013 a las casi 6.600 del año pasado. En cuanto a las multas por exceso de velocidad detectadas por los coches con radar, la cifra de interceptados solo aumentó en Lugo: un 17% más, con 17.640 denunciados el año pasado frente a los 16.651 de 2013.

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La mayoría de las infracciones detectadas por vehículos de Tráfico con matrículas civiles proceden de las provincias de Pontevedra (38,3% del total, unas 115 cada día) y A Coruña (33%, unas 90 diarias). En comparación con el año anterior, Ourense y A Coruña registran el mayor descenso de conductores interceptados por los coches camuflados de Tráfico, un 23,8% y un 22,7% menos respectivamente. En Pontevedra, la disminución fue de apenas un 3,2% mientras que en Lugo aumentó más de un 13%.

Autopistas, autovías, carreteras secundarias, travesías, pistas... Ninguna vía se escapa de los controles de la Agrupación de la Guardia Civiles de Tráfico en Galicia con coches camuflados. En cada vehículo de marcas y colores diferentes con matrículas civiles viajan dos agentes que vigilan el movimiento de cada vehículo que circula a en los tramos controlados. Velocidad inadecuada, uso del teléfono móvil, no utilización de los dispositivos de seguridad, ponerse al volante con una copa de más, conducción temeraria, adelantamientos indebidos, giros incorrectos, no respetar la distancia de seguridad... Son las infracciones que se repiten día tras día en el parte de denuncias.

"Prevención y seguridad"

Tanto de día como de noche, los coches camuflados están operativos y actúan como refuerzo de las patrullas por "prevención y seguridad" en los lugares más conflictivos, entre los que destacan las capitales de provincia, junto con Ferrol, Santiago y O Porriño. "Todavía hay un elevado número de accidentes mortales, en torno a un 40%, en los que la velocidad excesiva o inadecuada está detrás del siniestro", advierte el jefe de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil en Galicia, el teniente coronel Francisco Javier Molano. "Desde la DGT se está haciendo un esfuerzo en el control de velocidad, en especial en las carreteras secundarias, que es donde se producen más del 90% de los accidentes mortales", destaca Molano.

Para tratar de atajar el elevado número de accidentes provocados por pisar más de la cuenta el acelerador, los vehículos de la Agrupación realizarán controles individualizados de manera que los radares móviles distinguirán entre camiones, autobuses y turismos y multarán en función del límite de velocidad específico para cada tipo de vehículo.

Y además, cada conductor interceptado por sobrepasar el límite de velocidad o circular a una velocidad excesiva será sometido a una prueba de alcohol y drogas. Las estadísticas de Galicia mantienen en alerta a Tráfico, ya que es una de las comunidades con más positivos. Con casi 1.200 conductores sorprendidos cada mes con una copa de más en las carreteras de la comunidad, Galicia se sitúa en el segundo puesto del ranking nacional, solo por detrás de Andalucía (2.300). Por provincias, solo Sevilla y Málaga registran más denuncias por alcoholemia que A Coruña (unos 460 al mes) y Pontevedra (435).

En cuanto al consumo de drogas al volante, el balance de positivos coloca en los primeros puestos de la lista a Galicia, Andalucía y Valencia. Solo en el primer trimestre de este año, mil conductores dieron positivo en los narcotest practicados en la comunidad. Por provincias, Pontevedra registró el mayor número de sanciones por consumo de drogas entre enero y marzo (424), seguida de Ourense (336), A Coruña (190) y finalmente Lugo (50).