El Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo aprobó ayer una declaración institucional en defensa del Estado de las autonomías y en la que garantiza su respaldo a la respuesta del Gobierno y de los partidos democráticos ante el desafío secesionista de las fuerzas catalanas independentistas. Posteriormente, el presidente rechazó dar por hecho medidas "límite" como la suspensión de la autonomía, si bien "todos" los artículos de la Constitución tienen "un objetivo" y deben "aplicarse" si es preciso.

En la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consello de la Xunta, Feijóo dio a conocer un texto en el cual se alerta de que la declaración secesionista en el Parlamento catalán "es un desafío al conjunto del Estado de las Autonomías" y no solo "a un gobierno concreto", sino "a todas las comunidades que conforman España".

"Afecta a la nación plural producto de una larga historia, pero sobre todo, de la libre decisión de sus ciudadanos y de la voluntad democrática de los pueblos que componemos España", proclamó Feijóo.

También como "decidieron los diferentes territorios" conscientes de que "el Estado de las autonomías era la mejor fórmula de articular la pluralidad y la diversidad". "Galicia, como parte de España y los gallegos, como titulares de sus derechos democráticos, fuimos protagonistas en este gran pacto histórico", rememoró Feijóo, para añadir que, precisamente por eso, tampoco son "ajenos a los intentos fraudulentos de limitarlos".

'Espíritu de la aldraxe'

Si el presidente gallego ya había recurrido en intervenciones previas a agitar el espíritu de la aldraxe del Estatuto del año 79, la declaración aprobada por el Gobierno recuerda que "el mismo país que rechazó la pretensión" de que su autogobierno fuese "limitado" no puede ahora "permitir que se ponga en riesgo la España de las autonomías".

Y es que, según el Ejecutivo autonómico, permitir que se "ponga en riesgo la España de las autonomías" sería "tanto como decir que se ponga en riesgo la autonomía gallega".