La deuda le costará este año a la Xunta 1.598,2 millones. Es un 5,5% más que en 2015. En el conjunto de las autonomías, los gastos por los créditos en vigor caen, sin embargo, un 8,15%, según el Ministerio de Hacienda, algo en lo que tiene mucho que ver el Fondo de Facilidad Financiera y el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), que permite a las comunidades dotarse de recursos a interés cero. ¿Por qué Galicia no sigue la tendencia? Porque las amortizaciones a las que toda hacer frente este año son más que el pasado ejercicio. En concreto, 1.328,1 millones de euros, frente a los 1.180,4 millones de 2015. En intereses, en cambio, la Xunta pagará la menor cantidad de los últimos cinco años, un total de 268,7 millones.