La titular del juzgado de instrucción número dos de Lugo, Pilar de Lara, pidió a la Fiscalía que informe sobre "la declaración de complejidad" del caso Garañón, con lo que ganaría tiempo para llevar a cabo la instrucción. En una providencia a la que ha tenido acceso Europa Press, la instructora argumenta la complejidad de la causa en base tanto al número de investigados como a la tipología delictiva y a las tareas de investigación encomendadas a la Guardia Civil, "que implican la revisión de diversa documentación administrativa".

Se trata de un paso obligatorio tras la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, que marca que las investigaciones no deben dilatarse más allá de seis meses salvo que se considere que los asuntos tienen una complicación especial. Para estos casos, el marco temporal alcanza los 18 meses e incluso prevé la concesión de una prórroga hasta un máximo de otros 18 meses.