La crisis de precios en las explotaciones lácteas y los retrasos en los pagos de las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) asfixian cada vez más al sector ganadero gallego. Los productores gallegos se mantienen a la cola en la tarifa que perciben por cada litro de leche -muy por debajo de los 34 céntimos que estiman que deberían cobrar para cubrir los costes de producción- y la demora en los cobros de las subvenciones europeas ha provocado también retrasos en los pagos de las propias explotaciones a sus proveedores y empresas de servicios. Desde la Organización de Productores de Leche (OPL) advierten de que el retraso de este año en las ayudas de la PAC ha provocado "problemas de liquidez".

"Las ganaderías más grandes son las que menos dinero han percibido. Y del dinero que está por cobrar, los productores no veremos un céntimo porque es todo para pagar deudas a proveedores, que llevan meses esperando", aseguran desde la OPL.

El pasado 29 de abril, la Xunta anunció el pago de otros 22 millones adicionales de los pagos directos de la PAC. Con este abono, la Consellería de Medio Rural trataba de dar respuesta a la reclamación unánime del sector, que en un año especialmente difícil para las explotaciones lácteas la situación se agravó por este retraso ya que el pago venía haciéndose habitualmente en diciembre. Coincidiendo con el anuncio del nuevo pago, el Ejecutivo gallego destacó que Galicia lleva pagadas más de un 81% de las ayudas, frente al promedio nacional que está cerca del 74%. En total, se llevan tramitados 134,8 millones de euros de los pagos directos de la PAC en Galicia de la campaña 2015-2016, cuyo plazo finaliza el 30 de junio.

Para los productores lácteos en la comunidad estos pagos llegan tarde, y recuerdan que normalmente se hacían entre octubre y diciembre. Además, reclaman que el reparto de las ayudas se adapte a la realidad del sector, como se hace en otras comunidades autónomas.

Pagos según cultivos

"Los plazos de inspecciones de las superficies deberían adaptarse a las características de los cultivos gallegos, tomando como meses de referencia los comprendidos entre febrero y mayo", defiende el presidente de la OPL, Manuel Iglesias Agra, quien además denuncia que "las ayudas de la PAC, prometidas a bombo y platillo para las nuevas incorporaciones al campo son una tomadura de pelo". Según denuncia, "las cláusulas abusivas escondidas en la letra pequeña delatan que al final no las recibirá nadie, ya que ningún empresario está dispuesto a ceder el control absoluto de su empresa a una persona que acaba de iniciar su actividad".

"En el caso de las entidades asociativas o cooperativas, igualmente, de ninguna forma le van a ceder el 51% del control del negocio a un nuevo titular", prosigue. La OPL entiende que "esta es una forma de recortar el número de perceptores de ayudas" y considera que "no es en las nuevas incorporaciones donde deben hacer los recortes, sino en el elevado número de perceptores de ayudas de la PAC que ya no tienen ninguna actividad agraria". Aseguran que muchos agricultores siguen percibiendo esas ayudas, a pesar de que ya no realizan ninguna actividad agraria. De este modo el reparto de ayudas "no es igualitario", -concluye- y eso incide en las demoras de los pagos a proveedores, más teniendo en cuenta la crisis que están sufriendo.