El historiador y profesor de la facultad de Historia del campus de Ourense Julio Prada vuelve a hacer su particular homenaje a la memoria con su nuevo libro Marcharon con todo. La represión económica en Galicia durante el primer franquismo de Biblioteca Nueva.

En este trabajo fruto de varios lustros de investigación, el historiador aporta datos que avalan que "hasta 1945 el régimen de Franco abrió expediente civil o político a más de 14.000 personas sospechosas de ser izquierdistas o no tener un comportamiento acorde con las nuevas circunstancias".

"La represión que sigue al fracaso del golpe de Estado responde en sus inicios a una doble lógica: inhibir cualquier demostración de rebeldía y crear fidelidades compulsivas para asegurar la victoria", comenta el autor en su libro.

El historiador ahonda en las características de cada uno de los instrumentos empleados durante y después de la Guerra Civil, como fórmulas de represión económica. Destaca, por ejemplo, las suscripciones patrióticas que no eran siempre voluntarias; las multas, incautaciones y responsabilidades civil y políticas.

Sobre las suscripciones patrióticas para el sostenimiento del conflicto y de la retaguardia, Julio Prada subraya como aunque en teoría eran voluntarias "en la práctica eran obligatorias porque en caso contrario la persona se arriesgaba a ser multada". Finalizado el conflicto bélico, apunta, estas suscripciones se transformaron en otras modalidades de recaudación. Según datos recogidos por el docente Manuel Silva Ferreiro, las aportaciones en este concepto hasta mediados de abril de 1937 ascendieron en Galicia a más de 16 millones de pesetas y a casi 700 kilos de oro.