No toda el agua que sale de los embalses llega a los hogares. Por la red de distribución se pierden millones de metros cúbicos por averías en las tuberías e incluso las administraciones ven mermados los ingresos por los recibos del agua debido a fraudes en los contadores o errores de medida. La mejora en la red de abastecimiento ha permitido que Galicia redujese el volumen que pierde por fugas y averías en la canalización casi un 11% frente al 4% del conjunto del país. De los más de 243,13 millones de metros cúbicos distribuidos en la comunidad gallega en 2014 -año del que data el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre el suministro y saneamiento del agua en España publicado ayer- un total de 39,7 se extraviaron por fugas. O lo que es lo mismo, casi el 16,4% del agua suministrada en Galicia, un punto por encima de la media nacional, no llega a los hogares por roturas y averías en la red.
Tal cantidad de agua extraviada permitiría abastecer durante seis meses a toda Asturias, una comunidad de más de un millón de habitantes, o por un mes a la población de Cataluña o Madrid, que en todo 2014 consumieron 457,3 y 406,9 millones de metros cúbicos, respectivamente.
Por el contrario, las llamadas de las administraciones a un consumo racional del agua no han surtido efecto y los hogares de toda España gastan un 1,5% más que el año anterior. En el caso de Galicia, el aumento del gasto medio por habitante es todavía mayor: 8,4%. Una variación que convierte a la gallega en la tercera comunidad que más abrió el grifo, por detrás de Extremadura (donde aumentó un 10,7%) y Asturias (9,8%). En total, cada gallego consume de media cada día 129 litros, un volumen que sin embargo se queda por debajo de los 132 de la media nacional pero todavía muy por encima de los 80 litros que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).
A la cabeza de comunidades que más agua gastan por habitante están Castilla y León (166 litros al día), Comunidad Valenciana (162), Cantabria (152) y Canarias (144). En el extremo de la tabla, se colocan La Rioja (106), Navarra (111) y País Vasco (116).
Las mejoras acometidas por las administraciones en las redes de suministro permitieron a Galicia y a otras 11 comunidades reducir las pérdidas por fugas o averías. En el ranking autonómico, la comunidad gallega se sitúa como la quinta que más se redujo el volumen de agua extraviada respecto al año anterior (-10,7%), por detrás de La Rioja (-24,2%), Madrid (-22,8%), Asturias (-15,6%) y Castilla y León (-15,3%). Al final de la lista, está País Vasco, con un incremento del agua perdida por deficiencias en la canalización de más del 31%, seguida de lejos por Baleares y Murcia, ambas por encima del 8%.
A la cabeza de las autonomías que menos volumen de agua suministrada llega a los hogares, está Cantabria (más de un 25%), seguida de cerca por Extremadura (24%) y Canarias (20,2%). A la cola de la tabla están Cataluña (11,24%), País Vasco (8,9%) y Madrid (4,6%). Galicia, con un 16,36%, se coloca como la séptima que menos agua extravía por roturas de tuberías o averías.
A los más de 39,7 millones de metros cúbicos que pierde Galicia en un año por deficiencias en la red de abastecimiento, hay que sumar 16,96 más por lo que se denomina pérdidas aparentes. Es decir por errores de medida, fraudes y consumos autorizados no medidos que provocan un agujero en las arcas municipales ya que se trata de importantes cantidades de consumo por el que no se llega a pagar. En el conjunto de España, el volumen se redujo un 6,37% mientras que en la comunidad gallega la disminución rozó el 7,25%.
