El presidente de la Xunta reprendió ayer a los alcaldes de A Coruña, Santiago y Vigo, ninguno de ellos del PP, por su política aeroportuaria. Les acusó de "descoordinación", ya que "ningún ayuntamiento quiere coordinar los aeropuertos gallegos", lo que dificulta ejercer las competencias que el Estado posee en este sentido "cuando en un territorio hay alcaldes que lo que pretenden es descoordinar".
"Entrar en peleas localistas a ver quién da más, a ver quién puede más en llegar a paraísos de destino o en pagar vacaciones a gallegos que salgan fuera sin retorno de gente de otros lugares que vengan aquí... como comprenderá el gobierno de la Xunta no está para eso", advirtió.
Feijóo aludió directamente a las ciudades de A Coruña y Santiago en las que "el discurso es que están de acuerdo con la coordinación, pero el discurso no se concreta en actuaciones" con ese fin, dijo.
Frente a ello, defendió la necesidad de coordinarse. En todo caso, admitió que "no es un tema sencillo", entre otras razones porque el Estado es el que ejerce las competencias.
Pese a estas críticas, durante años la Xunta ha destinado millonarios fondos a Lavacolla en detrimento de Alvedro y Peinador. Y con los concellos coruñés y compostelano en manos del Partido Popular fue cuando más dinero municipal se destinó a subvencionar aerolíneas, en abierta competencia entre los tres aeropuertos gallegos y con duplicidad de vuelos.
A la actuación de las tres grandes ciudades contrapuso su mensaje de que "siempre que los aeropuertos gallegos quieran coordinarse, la Xunta está a su disposición".
Núñez Feijóo respondió así a una pregunta en la conferencia de prensa posterior a la reunión semanal con su equipo de gobierno sobre la posibilidad de reclamar al Estado competencias en la gestión aeroportuaria, tras las recomendaciones de un informe del Centro de Estudios Turísticos de la Universidade de Santiago.
El mandatario autonómico dijo desconocer este documento, pero reconoció que se trata de un "tema de alto calado" que debe ser estudiado "con mucha precisión" y "con mucho rigor para que España siga manteniendo un único sistema de aeropuertos".
Por otra parte, el geógrafo y economista experto en turismo Juan Requejo Liberal aseguró ayer en Santiago que las aerolíneas low cost y los portales de alquiler turístico son "elementos de depredación" que pueden hacer que los cascos históricos patrimoniales pasen a ser "restos fosilizados".
Para Requejo Liberal, el "gran peligro" de una ciudad Patrimonio de la Humanidad es "convertirse en un conjunto de elementos fósiles, muertos, y perder su principal valor, que es la longevidad", así como su capacidad de "mantenerse viva a lo largo de los siglos".
