Los grupos con representación en el Parlamento de Galicia sumaron ayer sus votos para pedir a la Xunta que regule el empleo de los microcréditos y el crowdfunding como herramienta de financiación de los partidos de cara a las campañas electorales. Pese al acuerdo alcanzado en comisión, en el debate se produjo un enfrentamiento entre Cristina Romero (PP) y Antón Sánchez (En Marea) sobre la financiación de los partidos. Después de que el diputado de En Marea considerase "acreditada" la financiación ilegal del PP, la parlamentaria popular le echó en cara las dudas expresadas por el Consello de Contas y el Tribunal de Cuentas sobre el recurso de "Podemos y sus Mareas" a estas nuevas fórmulas para la obtención de fondos.

Entre esas "dudas" a las que aludió está -citó- la dificultad para identificar a la persona o entidad que aporta el dinero y también para verificar su devolución, ya que, de lo contrario, podrían considerarse donaciones. Ante la referencia en una de las propuestas de En Marea a la "financiación ilegal" del "partido del régimen", la popular ourensana le ha recriminado esa "falta de respeto".