El arrastrero vigués Adexe Primero llegó ayer al puerto ruso de Murmansk, donde será investigado por supuesta pesca ilegal, tras ser interceptado por los guardacostas de Rusia el pasado jueves. La Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI), a la que está asociado el barco, considera que las acusaciones contra el buque gallego son "muy endebles". El presidente de ARVI, Javier Touza, aseguró que, por las informaciones que maneja, el principal indicio es que aparecieron unos aparejos de pesca, supuestamente del arrastrero vigués, en la zona económica exclusiva rusa en el mar de Barents. "Esto no quiere decir nada, ya que las nasas pudieron ser arrastradas por las corrientes o por otro barco", añadió Touza, que indicó que la monitorización vía satélite del pesquero debe ser definitoria en el proceso de inspección al que se someterá el barco tras su llegada ayer al puerto de Murmansk.

El Gobierno afirmó por su parte estar a la espera del acta de inspección de Rusia para saber qué cargos se imputan al pesquero. Mientras, el Ejecutivo contactó con la dirección general encargada de Pesca de la Comisión Europea y con la Embajada de España en Rusia para gestionar su apoyo al arrastrero vigués.