Agentes de la Guardia Civil de Ferrol, en colaboración con la Confraría de Pescadores de Ballarobre, decomisaron ayer un total de 40 kilos de almeja babosa e identificaron a siete furtivos relacionados con su extracción irregular en la ría ferrolana.

El Equipo de Controles de la Guardia Civil realizó las identificaciones en el apeadero de Neda, al borde de la ría, donde se percató de que los implicados carecían de licencias y documentación para realizar labores de marisqueo. Los agentes requisaron nueve aparejos de pesca entre los que había planchas de poliespán, raños, trajes de neopreno y capachos. Las autoridades entregaron el marisco a la cofradía de Barallobre para su posterior reinstalación.

El Instituto Armado explicó que la incautación se enmarca en el plan de acción contra la actividad irregular en las rías de la comarca de Ferrolterra y destacó la "coordinación" entre todos los participantes.