Seguro de sí mismo, pero preocupado por lograr la unión y que la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores encuentre el camino que le saque de la intranquilidad económica en la que se halla. Basilio Otero, elegido ayer nuevo presidente de los pósitos españoles es un hombre de mar. Ahora, a los cargos de patrón mayor de la cofradía de Burela y de presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Lugo, Otero suma la Presidencia de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores. Apenas cuatro horas después del escrutinio y su proclamación como presidente, regresaba a Galicia con "la esperanza de hacer las cosas bien con la ayuda de todos". "De no ser así, no me habría presentado. Mi objetivo fundamental es defender a la gente de la pesca", sentencia.

- Uno de sus retos es buscar una salida a la situación económica de la entidad. ¿Le preocupa?

-Mucho. Me preocupaba antes y me preocupa ahora. La Federación Nacional, como las cofradías, dependen de las cuotas de los socios, del mismo modo que lo hace de las subvenciones oficiales. Siempre hay inquietud. Confío en que salgamos adelante. Lo haremos.

-Las cofradías tienen un vínculo especial con la flota artesanal. ¿Hasta dónde llega su compromiso con ella?

-Los pósitos representan mayoritariamente a la flota artesanal. Este tipo de pesca es fundamental en casi toda España y la conozco bien. Estaremos al máximo con ellos, como siempre. Es nuestra fuerza motriz. Sin ella las cofradías perderían buena parte de su singularidad y, desde luego, su existencia.

-¿Cuáles van a ser sus primeros pasos?

-Tomar posesión y ponernos directamente manos a la obra. Hay mucho por hacer. Queremos reunirnos cuanto antes con los órganos de gobierno de la federación, pero también con las regionales y las cofradías. Es cierto que ya estamos trabajando, pero no podremos dar esos que usted denomina "primeros pasos", hasta después de Semana Santa. Manda el calendario.

-¿Compatibilizará los cargos que ostenta? ¿Podrá con todo?

-Genaro Amigo pudo. Creo que yo también. Eso me permitirá estar a pie de obra, sin perder contacto con nadie. Tengo aguante.

-¿Tanto como para mantener un contacto fluido con la federación regional de canarias y su presidente, Fernando Gutiérrez, muy crítico con la federación?

-Naturalmente. Canarias es una parte importante del entramado pesquero español y quiero ayudar al reconocimiento de su valor. Quiero con Canarias un contacto vivo y ayudaré al presidente de la federación en lo que haga falta. Si tuvo problemas ajenos a su cargo, no es una cuestión que afecte a la Federación Nacional. No lo voy a dejar a un lado. Será como cualquier otra comunidad pesquera.

-¿Cómo será la federación con Basilio Otero al frente?

-Debe facilitar la conexión con y entre las cofradías y las federaciones provinciales y regionales, para lograr la colaboración de todos los socios. Las cofradías son entidades o corporaciones de derecho público en las que todos y cada uno de los marineros tienen sus derechos y obligaciones. Pretendo que sea la casa de todos, para hablar sin ambages de los problemas que nos afectan y buscar soluciones adecuadas.

-Le han criticado porque dicen que es usted del PP.

-En España hay libertad de expresión. Yo respeto a quien la ejerce, y espero que me respeten a mí. Soy un afiliado a la mar y representante de los marineros. Mi color es el del mar cada día y solo me preocupan los marineros y sus familias. Esta es mi militancia activa, mi preocupación fundamental.