Galicia defendió ayer ante Bruselas la necesidad de mejorar la gestión de la pesca para evitar que queden cupos sin consumir en su totalidad y reclamó que se suavice la práctica de los descartes. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, mantuvo una reunión con el director general de la Dirección General de Asuntos Marítimos y Pesca (DG Mare) de la Comisión Europea, João Aguiar Machado, en la que coincidieron en la necesidad de flexibilizar los Totales Admisibles de Capturas (TAC). Esto permitiría que los países con mayor capacidad o que necesiten más cantidad de pescado para capturar en una campaña puedan utilizar las cuotas de los estados miembros que no las consumen.

El presidente del Gobierno gallego y el director general de la DG Mare abordaron durante la reunión la necesidad de suavizar la política de descartes para evitar que suponga una traba en el trabajo diario de los barcos comunitarios. La normativa europea exigirá a partir de 2019 desembarcar todas las capturas realizadas por la flota , lo que genera un problema a los buques que disponen de poco cupo de determinadas especies capturadas de forma accidental -pesca no dirigida-.

El presidente autonómico y el dirigente europeo concordaron en que es indispensable trabajar en la sostenibilidad de los caladeros. Este aspecto interesa a la industria y a los pueblos que pescan porque viven de eso, según señaló Feijóo, para quien "lo lógico" es que la flota gallega pueda continuar con la actividad en Gran Sol y las Malvinas tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea.

El presidente de la Xunta le entregó a Machado A retirada do Reino Unido da Unión Europea e as súas posibles consecuencias para o sector pesqueiro galego y se comprometió a presentar un segundo texto que analice los efectos socioeconómicos de la salida de Reino Unido de la UE en Galicia que elaboran conjuntamente la Facultade de Ciencias Económicas e Empresariais de la Universidade de Santiago de Compostela. El objetivo, aseguró, es concienciar a la UE y a España de que tengan en cuenta como prioritarios los intereses gallegos. "Tenemos que estar permanentemente en contacto con las autoridades estatales y comunitarias y presentar informes sobre el impacto social y económico", añadió.

El primer informe analiza la necesidad de un acuerdo internacional sobre el acceso mutuo a los recursos pesqueros y advierte que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dejará de tener competencias para resolver litigios entre Reino Unido y la UE, por lo que habrá que recurrir al derecho internacional.

El presidente del Ejecutivo autonómico visitó tras la reunión la feria Seafood, donde participan más de 60 empresas gallegas dedicadas a las actividades pesqueras de procesado y transformación. El año pasado, asistieron 46 firmas, 32 de las cuales formaron parte del stand del Gobierno gallego.