La Junta de Gobierno Local ha aprobado de forma inicial el plan especial para la ampliación de la planta de la empresa SGL Carbón del polígono de A Grela, aunque el Concello condiciona la autorización definitiva a que la compañía corrija los fallos que la arquitecta del Ayuntamiento ha detectado en el documento. La técnica municipal ha emitido un informe "desfavorable" sobre el proyecto, ahora en exposición pública, por la ausencia de un estudio económico o la exclusión del impacto sobre el entorno, entre otros puntos. El edil de Urbanismo, Martín Fernández Prado, dio ayer por supuesto que los trabajos se llevarán a cabo y que la compañía, con más de 200 empleados, dispondrá de una planta amplia y moderna.

En su informe sobre el documento del plan especial para las obras, la arquitecta municipal destaca la ausencia de un estudio económico-financiero, algo que, en su opinión, invalida por completo el contenido de todo un apartado. También alerta la arquitecta de que quienes elaboraron el texto no justifican adecuadamente la integración en el territorio, especialmente en lo referente a la resolución de los problemas viarios.

El informe por el que el Concello exige cambios en el documento del plan especial de SGL recoge, sobre las conexiones de la planta, que únicamente se menciona en el texto uno de los accesos de los que, supuestamente, dispondrá la factoría. La arquitecta demanda, además, una mención de las canalizaciones y otros servicios que afectan a la parcela.

"Tampoco se justifica", entienden los técnicos, "si existe la necesidad o no de medidas de protección que garanticen la funcionalidad y el acceso". En concreto, habla de servidumbres y afecciones "de importancia", como el límite con la AC-552, con el trazado del río Mesoiro "que tiene servidumbre de protección" y que la parcela está dentro de la zona de intervención y zona de alerta impuesta por el plan especial de emergencia exterior de A Grela-Bens, por la proximidad a la refinería.

Las obras permitirán ampliar en un 15% la superficie de la planta y construir una nueva torre y, según la propia empresa SGL, tardarán en completarse tres años desde que comiencen.

El Gobierno local ha adjudicado las obras para el desescombro y limpieza correspondientes a la última fase del plan para la regeneración de los terrenos sobre los que en el pasado se levantaba el poblado chabolista de Penamoa. Los trabajos, según informó ayer el concejal de Medio Ambiente, Enrique Salvador, han sido adjudicados a la empresa arteixán Excavaciones J. Cancela Esmorís por un importe de 161.741 euros.

La tarea de la empresa adjudicataria, según expuso el edil, será la de completar los trabajos de desescombro, que ya se habían desarrollado en anteriores fases, y la de, una vez recogidos todos los desperdicios que quedan en el espacio que ocupaba el poblado, regenerar la zona con medidas como la plantación de árboles y otras especies vegetales autóctonas. Salvador comentó que en Penamoa quedan residuos de todo tipo, desde tablas de madera que permanecen en la zona tras el derribo de las chabolas, hasta restos contaminantes de materiales como el amianto que precisan un procedimiento especial para su retirada.

El Concello, según informó Salvador, no planea, por el momento, crear un parque o implantar equipamientos en la zona de Penamoa, sino únicamente "recuperar" este espacio paisajísticamente.