Las Marchas da Dignidade celebraron ayer en el Paraninfo de la Universidade da Coruña su segunda asamblea. En esta reunión, los más de un centenar de participantes evaluaron el estado del movimiento de cara a la concentración que se celebrará el 24 de octubre en Compostela. El lema y las reivindicaciones serán las mismas que defendieron las marchas desde su creación: "pan, trabajo y techo". Los representantes de las marchas en las comarcas abogaron por seguir trabajando para combatir "la situación actual de sometimiento popular a la dictadura del poder económico". Sobre el escenario, los integrantes de las marchas defendieron también "la unidad popular" como herramienta.
"Unidad Popular no es la unidad de los partidos políticos, sino el trabajo conjunto entre la ciudadanía no organizada, los movimientos sociales y los partidos políticos", explicaron los ponentes. Las marchas hicieron ayer un llamamiento a todas aquellas personas y organizaciones contrarias a las políticas marcadas por la troika a que se "sumen a luchar conjuntamente contra esa organización antidemocrática". La actriz Mónica Camaño fue la encargada de inaugurar el acto con un texto que ponía el acento sobre el lenguaje sexista.
