El pleno ordinario del mes coincidió con una efeméride histórica, el 13 de junio, día del año pasado en el que un alcalde al frente de un partido político sin experiencia y con menos de un año de actividad, agarraba el bastón de mando a pie de calle en la plaza de María Pita, frente a unas decenas de vecinos, para empezar a gobernar A Coruña. La investidura de Xulio Ferreiro fue recordada nada más comenzar la sesión por la edil de Facenda, Eugenia Vieito, poco después por el concejal de Culturas, José Manuel Sande, y minutos más tarde por el alcalde, que en lo que fue la antesala de la exposición del proyecto de la renta social admitió sentir "un inmenso honor y una inmensa responsabilidad" por estar el frente del Gobierno de la ciudad.

Las alusiones que Ferreiro hizo a acciones dignas de recibir la aprobación de distintos colectivos, como la organización de los Dillo ti, los presupuestos participativos, la municipalización de la gestión de las bibliotecas o el cumplimiento de la ley de la memoria histórica, fueron neutralizadas a lo largo de la sesión, de más de seis horas de duración, por los grupos de la oposición, unos con más furor que otros.

El PP, por ejemplo, reprochó al regidor la lentitud en las gestiones. "Dicen que van a hacer mucho y luego no hacen. Ir despacio hace mucho daño a una ciudad", advirtió Miguel Lorenzo. "Ustedes vuelven a los pinchos, a los coches oficiales y al despilfarro en publicidad", atacó la portavoz popular, Rosa Gallego. "Marea y PSOE solo se ponen de acuerdo en dos cosas: en que gobierne Ferreiro y en subir los impuestos", dijo Roberto Coira, quien acusó al Gobierno local de "gastar 140.000 euros al mes de forma irregular" por no cumplir la ley de contratos de la Administración pública.

Fueron reproches esporádicos al hilo de asuntos tratados en mociones o preguntas que pretendieron minar cualquier intento de realzar el trabajo del Gobierno de Marea. El BNG criticó la "escasa acción en materia de movilidad", el PSOE recordó que "el grupo de Marea no representa a la mayoría de los coruñeses" y el PP puso en duda la "supuesta transparencia" que defiende el alcalde al recordar que no ofrece información sobre acuerdos con empresas. La participación unió a la oposición para criticar al Gobierno por los reglamentos de intervención ciudadana en la elaboración del presupuesto o la convocatoria de los Dillo ti; habrá otro de estos encuentros el 9 de julio y la comisión de participación revisará los reglamento esta semana, avanzó Claudia Delso.