La Oficina contra el Cambio Climático iniciará hoy su andadura. Es una comisión integrada por representantes municipales que tiene el objetivo de poner en marcha estrategias destinadas a reducir el impacto del dióxido de carbono en la ciudad, que es uno de los compromisos del Pacto de los Alcaldes y las Alcaldesas para el Clima y la Energía, firmado en 2012. Esta comisión estará presidida por la concejal de Medio Ambiente, María García, que será la encargada de convocar las reuniones, al menos dos sesiones cada año, contará con los jefes de servicio con competencias en medio ambiente de las demás concejalías -Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda, Facenda e Administración, Emprego e Economía Social, Culturas, Deporte e Coñecemento, Participación e Innovación Democrática, Mobilidade Sostible, Xustiza Social e Coidados, e Igualdade e Diversidade- y también formará parte de esta comisión un técnico de la Concejalía de Medio Ambiente, que ejercerá de secretario.

Además de este órgano, la comisión podrá crear grupos de trabajo para desarrollar proyectos concretos vinculados a los objetivos de la oficina, entre ellos está proponer iniciativas para hacer un uso racional de la energía, que estén enfocadas al ahorro y a la transición hacia las energías renovables. Otra de las metas que se pone este órgano es la de fomentar la investigación y analizar las posibilidades de financiación para la puesta en marcha de proyectos orientados a reducir las emisiones de carbono.

A mediados del mes de abril, la Junta de Gobierno Local aprobó un informe en el que definía 17 objetivos para lograr la meta de reducir las emisiones de dióxido de carbono en más de un 20% en 2020. Esta lista de deberes por hacer contempla, por ejemplo, la elaboración de un plan de rehabilitación de viviendas para lograr su mejora energética, también la concesión de subvenciones a los taxistas que adquieran vehículos menos contaminantes, la celebración de fiestas sostenibles y actos "neutros en carbono", así como la separación del río Pastoriza del sistema de saneamiento municipal. Con este recurso, el Concello considera que optimizará el uso energético del ciclo del agua.

La oficina nació también con el objetivo de realizar acciones divulgativas que muestren a los vecinos cuál es el trabajo que desarrolla el Concello para combatir el cambio climático.

El pleno aprobó por unanimidad en enero una moción del grupo de Gobierno local sobre el cambio climático por la que precisamente se reforzaba el trabajo de la oficina municipal. Entre otras medidas se estableció el compromiso de elaborar un plan de adaptación al cambio climático con medidas preventivas, analizar objetivos medioambientales marcados por otros organismos como la federación de municipios de España y su homóloga en Galicia.