La apertura por el Concello de la declaración de caducidad de cuatro licencias de obra en el polígono de Náutica, aprobada ayer por la Junta de Gobierno Local, cogió por sorpresa a los promotores de los edificios, que prevén recurrir esa decisión municipal, según fuentes próximas a ellos. Los empresarios pretenden además entablar una negociación con los responsables de la concejalía de Rexeneración Urbana para tratar de evitar perjuicios a los proyectos que tienen en marcha en el lugar y que suman un total de 167 viviendas, aunque la situación de cada uno de ellos es diferente.

Uno de los edificios ha alcanzado la altura máxima prevista, mientras que otro tan solo cuenta con la planta baja y dos alturas. En otros casos tan solo se ha realizado la excavación necesaria para los cimientos de las edificaciones. En el polígono hay parcelas de otros propietarios que todavía no solicitaron licencia de obras y que cuando lo hagan se verían obligados a ajustarlas al nuevo plan general, según ha concluido el Concello al analizar las licencias ya concedidas y ahora caducadas. Las cuatro promotoras que ven anulados sus permisos se ciñeron en su momento al anterior plan general. Náutica fue una de las Áreas de Planeamiento Incorporado a la nueva normativa urbanística.

El Gobierno local inició la declaración de caducidad de las licencias porque las empresas sobrepasaron el plazo de dos meses para la presentación del proyecto de ejecución de las obras, de seis meses para su inicio y de tres años para su conclusión. Durante este tiempo, las promotoras presentaron solicitudes de prórroga para cumplir estos plazos debido a la imposibilidad de construir en el lugar por la permanencia de uno de los antiguos vecinos, así como porque se estaba realizando el aparcamiento comunitario para dos de los inmuebles.

El Ayuntamiento les concedió esa moratoria, pero una vez solventados los problemas, reabrió el periodo durante el que debían presentar la documentación exigida y ejecutar las obras, sin que los afectados cumplieran sus obligaciones, lo que motivó el inicio de la declaración de caducidad de las licencias.

Los promotores desconocen los efectos que puede causar en sus proyectos la decisión del Concello de declarar caducadas sus licencias, así como la de que las que soliciten a partir de ahora se adapten al plan general vigente. La resolución se basa en un informe municipal en el que se menciona que de acuerdo con la normativa urbanística vigente estos inmuebles tienen un exceso de edificabilidad, por lo que las nuevas licencias tendrán que ajustarse a esas disposiciones.

Este aspecto tendría especial trascendencia para el edificio que alcanzó ya la altura proyectada, puesto que si se confirma que tiene más edificabilidad que la permitida, su promotor se vería obligado a modificar lo construido. La decisión municipal de iniciar el procedimiento para declarar caducadas las licencias fue tomada tras un proceso que se detalla a continuación.

EPromoción de 30 viviendas. La empresa que promueve este proyecto recibió la licencia del Ayuntamiento para construirlo el 1 de junio de 2012, aunque el 2 de octubre de 2013 se aprobó una prórroga de seis meses para cumplir los plazos fijados ante los problemas causados por el propietario que hubo que desalojar. La paralización se extendió sin embargo hasta el 4 de julio de 2014, pero la promotora no entregó el proyecto de ejecución hasta el 21 de enero de 2015, seis meses después de que se le comunicara el levantamiento de la prórroga.

EPromoción de 60 viviendas. El 25 de enero de 2013 la empresa que lleva a cabo esta iniciativa inmobiliaria recibió la licencia municipal, aunque el 1 de octubre de ese mismo año se decretó una prórroga por los mismos motivos que en el caso anterior. La comunicación del Concello de que podía retomar las obras le llegó el 16 de junio de 2014, pero su proyecto de ejecución no fue entregado en Rexeneración Urbana hasta el 21 de junio de 2015, el mismo día que la empresa precedente.

EPromoción de 47 viviendas. La licencia municipal para esta actuación fue concedida el 15 de junio de 2012, pero tuvo que pedir una prórroga que le fue autorizada el 1 de abril de 2013. El 5 de junio de ese año se le informó de que podía continuar el proyecto, pero meses después solicitó un nuevo aplazamiento que se le concedió el 14 de enero de 2014 y que concluyó el 1 de julio de ese año. Finalmente, entregó el proyecto de ejecución el 7 de marzo de 2016.

EPromoción de 30 viviendas. La licencia se aprobó el 23 de febrero de 2012, aunque el 30 de agosto del año siguiente se le autorizó una prórroga que se prolongó hasta el 4 de julio de 2014. El promotor no llegó a presentar la documentación requerida ni solicitó un nuevo aplazamiento, por lo que la inspección urbanística certificó el 28 de junio de 2016 que las obras del edificio proyectado no se habían realizado.