Un emigrante retornado hizo popular en la televisión de los 90 aquella frase de que "lo bueno de ser gallego es que puede serlo cualquiera". Prueba de ello dieron ayer un grupo de futbolistas japoneses que, en un torneo de fútbol sala celebrado en el barrio de la Sagrada Familia, salieron al campo con una equipación en la que se podía leer Da terra. Lejos de ser algo intencionado, los deportistas del país del Sol naciente tuvieron que vestir la camiseta con este paradójico lema en gallego al no contar con una equipación homogénea para todos los jugadores. Ya lo dice el dicho: "Hay un gallego en la Luna". También en Japón.