La Universidade da Coruña (UDC) propone nombrar al arquitecto Norman Foster doctor honoris causa. Sería el vigésimo cuarto que entra en esta lista de la más alta distinción académica que otorga la entidad académica. Nacido en Manchester en 1935, Foster se convertiría en el primer arquitecto en recibir este título como homenaje a sus obras y a la importancia que otorga a la consolidación del futuro en todos sus proyectos. Fortalecería así su vínculo con Galicia, ya que su segunda mujer -Elena Ochoa- es una editora y comisaria de arte contemporáneo que nació en Ourense.

Autor de la renovación del Reichstag de Berlín y del Aeropuerto de Hong Kong, el arquitecto británico realizó sus estudios en la Universidad de Manchester y los completó en Yale. Gracias a la propuesta del Departamento de Proxectos Arquitectónicos, Urbanismo e Composición, recibiría su tercer honoris causa. Ya fue investido por las Universidades Politécnicas de Valencia y Madrid. La Escola Técnica Superior de Arquitectura de A Coruña ha querido mostrar su apoyo a través de las redes sociales a este nombramiento. En 1999, recibió el reconocido premio Pritzker de arquitectura que concede cada año la fundación estadounidense Hyatt. Diez años más tarde, en 2009, se le concedió el Príncipe de Asturias de las Artes.

Es el quinto honoris causa consecutivo de procedencia extranjera. El inglés John Rutherford, hispanista y traductor; el estadounidense Thomas J. R. Hughes, profesor y científico; la holandesa Elisabeth Van Bruggen, terapeuta ocupacional: y el americano Michael W. Apple, pedagogo y sociólogo, preceden a Norman Foster en una lista en la que hay otros cuatro foráneos: los portugueses Mario Alberto Nobre Lopes y Aníbal Antonio Cavaco, el irlandés Seamus Heaney y el neoyorkino Gerald M. Iglesias. La primera homenajeada por la UDC fue Carmela Arias y Díaz de Rábago en 1991 y el británico sería el vigésimo cuarto en lograr este reconocimiento si lo acepta cuando reciba la notificación. El arquitecto no solo tiene una fuerte conexión sentimental con Galicia, también con toda España. El mes pasado, en Madrid, se inauguró la Fundación Norman Foster en la que los visitantes pueden comprender cómo diseña, de dónde salen sus ideas o cuáles son sus preocupaciones.