La ciudad registró entre enero y marzo 120 robos en domicilios, locales comerciales u otro tipo de instalaciones, según la estadística de criminalidad publicada por el Ministerio del Interior, que especifica que las infracciones penales aumentaron en esas fechas un 3,1% con respecto a 2017. En total, se contabilizaron 2.395 delitos. Los datos reflejan que se produjo más de una sustracción diaria sin violencia ni intimidación en viviendas y establecimientos -1,3 de media al día-. En comparación con el año pasado en las mismas fechas, los robos con fuerza en pisos o locales bajaron un 15,5%.

A principios de marzo la Policía Nacional aumentó la presencia de coches camuflados en las calles debido a las numerosas denuncias por robos en inmuebles de la ciudad. Los sindicatos del 091 criticaron la solución, pues demandan más agentes dedicados a tareas de investigación de estos delitos, ya que advierten de que las bandas organizadas especializadas en robos en viviendas no se desarticulan solo con más presencia policial en las calles.

De los 120 robos con fuerza, 49 se cometieron en domicilios, frente a los 61 del primer trimestre de 2017, lo que supone una reducción de un 19,7%. Las sustracciones con violencia e intimidación también bajaron un 7,5%, pues pasaron de 53 a 49. Los hurtos -robos sin violencia ni intimidación- subieron entre enero y marzo un 6,6%, ya que se registraron 907, frente a los 851 del año pasado en las mismas fechas. En 2017 fueron sustraídos 29 coches; y, este año, ocho, lo que supone una disminución de un 72,4%.

En los tres primeros meses de 2018 se produjo un homicidio. Sucedió el 8 de enero en el refugio de Padre Rubinos. Un usuario nacido en 1974 falleció al ser apuñalado por otro en el interior de las instalaciones situadas en la ronda de Outeiro. El homicida atacó a la víctima en un patio exterior durante una discusión y se dio a la fuga, pero fue detenido horas después en un edificio de la avenida de Oza. En el primer trimestre de 2017 no se cometió ningún homicidio ni asesinato en la ciudad. Sí hubo tentativas, cuatro, un 75% más que este año, pues solo hubo una.

En cuanto a los delitos relacionados con la libertad sexual, se contabilizaron 18, los mismos que en 2017. La estadística refleja un aumento de un 66,7% de los asuntos relacionados con el tráfico de drogas. Diez casos se detectaron este año; y, en 2017, seis.

La Delegación del Gobierno en Galicia informó ayer de que la tasa de criminalidad de la provincia de A Coruña es de 30 delitos por cada 1.000 habitantes, lo que supone un incremento de 0,3 puntos respecto al primer trimestre de 2017. Los principales repuntes se produjeron en delitos relacionados contra el patrimonio -6,5%- y contra la seguridad vial -5,5%-. La Delegación del Gobierno destaca la reducción de casi un 69% en la sustracción de vehículos y de un 16,7% en los robos con violencia en domicilios.