La empresa gestora del Palacio de la Ópera, de Palexco y de los Cantones Village redujo sus pérdidas durante el ejercicio de 2017, aunque sus números siguen siendo negativos. La empresa Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico se deja 1,39 millones de euros en un año de actividad, un 31,7% menos que en 2016, cuando el déficit fue de 2,03 millones. Desde 2012, la firma del empresario coruñés José Collazo Mato ha acumulado pérdidas por valor de 13,8 millones.

Durante el último ejercicio logró que su cifra de negocio subiera de 3,37 millones de euros a 3,47 y rebajó su endeudamiento, de los 18 millones que acumulaba en 2016 pasó a los 16,76 millones con los que cerró este último ejercicio. Su plazo medio de pago aumentó de los 166 días a los 175 y el de cobro casi se duplicó en tan solo un año, de 58 a 108 jornadas.

En 2011, la empresa tenía 23 empleados pero esa cifra fue bajando con el paso de los años, había llegado a tener 27 en 2006, aunque ahora queda apenas una decena después de que Comar -que es la empresa matriz- echase al personal directivo del Palacio de la Ópera y también al de Palexco, tal y como adelantó este periódico, para reorientar la actividad del palacio de congresos y dejar a un lado este tipo de actividades para centrarlo en celebraciones públicas.

La empresa prevé también deshacerse del recinto cultural y que sea el Concello quien se haga cargo de él. Si bien el Gobierno local y la empresa empezaron las negociaciones para cerrar la operación, todavía no han llegado a un acuerdo. Las instalaciones del Palacio de la Ópera necesitan una inversión de unos dos millones de euros, ya que tanto el escenario, como las partes que no se ven del edificio necesitan ser reparadas. La empresa solo aceptó el año pasado a renovar el patio de butacas, una actuación en la que invirtió 843.000 eurospatio de butacas, 7.000 euros menos de lo que le paga anualmente el Concello a la empresa en concepto de reserva de las instalaciones, ya que la Orquesta Sinfónica de Galicia, que tiene en el Palacio de la Ópera su sede principal, puede ocupar este edificio durante 200 días al año.

Si la Sociedad de Fomento y Desarrollo Turístico renuncia a la organización de congresos, uno de los puntos fuertes del plan estratégico del turismo de la ciudad se verá afectado, ya que era precisamente ese tipo de turismo de negocios y conocimiento el que el documento pretendía promover.

No es la primera vez que los recintos de esta empresa tienen que cambiar de actividad, los Cantones Village, por ejemplo, dejaron atrás su función de centro comercial y, actualmente, su vida se reduce al ocio nocturno, con la macrodiscoteca Pelícano y también con los cines y los locales de hostelería que se asientan en el edificio tras la marcha de las firmas de ropa y de complementos.