El dictamen del Consello Consultivo, que considera nula la compra de dos viviendas para alquiler social por parte del Concello, ha provocado la dimisión de la jefa de servicio de Rehabilitación y Vivienda, Natalia Codesal, que fue la presidencia de la comisión de valoración del concurso. A pesar de su trabajo "leal", el concejal de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, anunció el cese, acordado con el alcalde, Xulio Ferreiro, y que se hará efectivo en próximos días. Varela explicó ayer que, para que el órgano autonómico "llegue hasta el final" en la evaluación del proceso, el Gobierno local le remitirá los expedientes de cinco de las seis viviendas compradas en 2017.

"El alcalde tiene mi dimisión en sus manos todos los días", apuntó Varela al ser preguntado por su posible cese, añadiendo que tanto él como Ferreiro están de acuerdo en que la responsabilidad es de los funcionarios. Calificó de "errores humanos" las irregularidades detectadas en el concurso, aunque se comprometió a "seguir confiando" en los trabajadores municipales. El concejal defendió que la iniciativa de compra de viviendas por parte del Ayuntamiento es "viable" y avanzó que su departamento ya está trabajando en unas nuevas bases "que no tengan equívocos". "No se puede repetir lo que sucedió en esta ocasión. La nueva convocatoria tendrá seguridad jurídica", apostilló.

También defendió este tipo de política de vivienda el alcalde, en la que, dijo, "tenemos que seguir profundizando para cambiar el mercado inmobiliario". Ferreiro reprochó que las críticas del PP provienen de que ese partido "quiere que la vivienda sea un bien especulativo" mientras que el Ejecutivo municipal, con este concurso, daría una vivienda a familias con dificultades "para que no pasen la noche en la calle". El regidor, con tono muy serio, respaldó realizar una nueva convocatoria y confirmó que se "paliarán errores" y se "despejarán dudas" cuando se cierre el actual procedimiento.

Sobre lo sucedido hasta ahora, Ferreiro ve una "cadena de errores" en la aplicación de los requisitos y, aunque dijo que el proceso era "mejorable", reconoció de los propios funcionarios que cometieron los fallos las "muchas horas" dedicadas y "el esfuerzo" por desarrollar el concurso que, recordó, es el primero de este tipo que se convoca en el Concello coruñés.

Desde la oposición, aún sin conocer de primera mano el informe, criticaron el devenir del procedimiento y pidieron explicaciones. La portavoz del PP, Rosa Gallego, pidió la dimisión de los concejales Xiao Varela y Alberto Lema -con competencias en contratación-, por ser los "responsables legales y políticos" de los expedientes relacionados con la compra, firmados por ellos, y rechazó el cese de ningún funcionario. La popular afirmó no estar sorprendida por el dictamen del Consultivo: "Lo tuvimos clarísimo desde el principio. El informe nos da la razón". Alertó, por último, de las posibles indemnizaciones que soliciten los dueños de los pisos si finalmente son declaradas nulas las adquisiciones: "No vamos a consentir que ni un euro de las arcas municipales vayan a esta desfeita ".

Desde el PSOE, su portavoz, José Manuel García, criticó que "no hubo libre concurrencia" y que los criterios de "flexibilidad" realmente, dijo, fueron de "parcialidad". El socialista lamentó la "dura posición" en la que deja a los funcionarios y afirmó que la decisión del órgano autonómico "pone a la ciudad a los pies de los caballos". Por último, la concejala del BNG, Avia Veira, también insistió en que las bases se aplicaron "laxamente" y se preguntó si es "justo" que, tras la polémica, dimita la jefa de Rehabilitación y Vivienda. La nacionalista lamentó que el Ejecutivo municipal no fuera "cuidadoso" con la tramitación del concurso para "garantizar su éxito".