La reestructuración del grupo Comar, propiedad del empresario coruñés del juego José Collazo, se llevó por delante al histórico director gerente del Palacio de la Ópera y Palexco, Enrique Pena, con treinta años de trabajo a sus espaldas. De ellos habla en una carta de despedida, en el que repasa los retos y dificultades que se tuvieron que superar y tiene también palabras para el futuro de los dos edificios. Tras una crisis "que se manifestó en la ciudad con toda su virulencia", cree que las aguas "vuelven poco a poco a su cauce" y que los congresos regresan "lentamente". Augura un 2019 "prometedor". Sobre el Palacio de la Ópera, considera que seguirá "indisolublemente asociado" a la Sinfónica de Galicia y considera "posible y cercana" la reversión de la gestión del auditorio al Concello.

"Han sido 30 maravillosos años, con apasionantes retos y desafíos que han propiciado lo que hoy representan tanto el Palacio de la Ópera como Palexco", relata la misiva, a la que ha tenido acceso este periódico. Rememora cómo se concibió el Palacio de la Ópera, ligado a la música y a los congresos, en 1989, donde la Orquesta Sinfónica ha sido "una pieza fundamental". "No se sabe muy bien dónde acaba uno y comienza el otro", señala Pena, que opina que el futuro de recinto y formación "deben continuar indisolublemente asociados".

Tres mil actuaciones y 2,7 millones de espectadores de espectáculos de diversa índole es el balance que dejan estas tres décadas "sin apenas incidentes reseñables" y que convirtieron al auditorio de Santa Margarita un "referente nacional". "La posible y cercana reversión del Palacio de la Ópera al Concello probablemente cerrará un intenso y apasionante ciclo, abriendo un tiempo nuevo del edificio ya bajo el paraguas de una Administración pública", indica.

El Concello y Comar, como concesionaria, han negociado en los últimos años el traspaso del auditorio, en un estado pésimo que ha denunciado quien lo tiene que padecer, la Sinfónica de Galicia y sus músicos. La "falta de mantenimiento" hace que, para su reparación, sean necesarios dos millones de euros, según un informe encargado por el Concello. Según el contrato de concesión, es la empresa la que tiene que abordar la inversión pues, una vez expirado, se debe entregar el edificio como fue entregado.

Del récord a las pérdidas

Enrique Pena habla también de Palexco. De cómo nace en 2003 cuando, en una A Coruña pre crisis, la ciudad vivía "una auténtica época mágica" con un "magnífico posicionamiento de marca ciudad" coincidente con la "expansión de entidades financieras, fundaciones, corporaciones, grandes empresas....". Las cifras récord de congresos y convenciones se frenaron poco tiempo después: "desgraciadamente la crisis llegó y se manifestó en la ciudad con toda su virulencia haciendo desaparecer gran parte del tejido mercantil e industrial y por ende todo el negocio y beneficios que proyectaban".

Después de "años duros", considera que "lo peor ha pasado" y ve que los congresos "vuelven lentamente". "El año 2019 es prometedor y la actividad del sector se va recomponiendo acompasada con la actividad de la propia ciudad", dice. Insiste en que es importante "la imagen del destino" para que el sector pueda funcionar y que son muchos los beneficiarios de "un buen funcionamiento del recinto".

Agradece la "confianza" y la "libertad" que le ha dado Comar en treinta años. La empresa sufre pérdidas continuadas desde hace cinco años y ha decidido reorientar la actividad de Palexco. Entre otras cuestiones, prevé promover celebraciones sociales en detrimento de los congresos, cuestión que ha hecho saltar las alarmas en el Ayuntamiento por la importancia de este tipo de eventos para A Coruña.