El Juzgado de Instrucción número 5 de A Coruña investiga a los antiguos gestores del ascensor del monte de San Pedro por un posible delito continuado de estafa entre los años 2010 y 2014. Fue la Fiscalía la que presentó una querella en los tribunales tras analizar hechos puestos en conocimiento a finales de 2017 por el Concello, cuyo erario ha de cubrir las pérdidas de la concesión por contrato y que elaboró un informe en el que denunció, durante esos años, anomalías contables, excesos de facturación por limpieza y vigilancia y gastos desproporcionados. La Fiscalía señala, además de a la concesionaria, Miramar de San Pedro, a la subcontrata de limpieza, Rúa Real SL, que compartieron cargos sociales.

Al tiempo que se inicia una nueva etapa para el restaurante y el ascensor, con el traspaso de las acciones de la sociedad concesionaria el pasado año, el juzgado pone el foco en los antiguos gestores. Son dos personas y dos sociedades las investigadas por el juez de Instrucción. Según informa la Fiscalía, abrió diligencias de investigación penal en noviembre de 2017 después de recibir un informe de la Asesoría Jurídica municipal al respecto.

Estas diligencias, prosigue el Ministerio Público, derivaron en la presentación de una querella en el juzgado al apreciar indicios de delito, el 7 de mayo de 2018. Una semana más tarde, el Juzgado de Instrucción número 5 procedió a incoar diligencias previas. La Fiscalía provincial de A Coruña confirma que su querella se centra en el periodo entre 2010 y 2014, ambos ejercicios incluidos, y que detectó indicios de un delito continuado de estafa.

El contrato firmado en 2005 por el Gobierno de Francisco Vázquez con Miramar de San Pedro obliga al Concello a asumir las pérdidas del mirador, de entrada gratuita y sin posibilidad de generar ingresos, y del ascensor, en el que los tres euros de entrada no compensan la caída continua de pasajeros. Hasta 2012, el Ayuntamiento aprobó sin objeciones las liquidaciones presentadas por la empresa. Así lo hizo el Gobierno del PSOE, el Gobierno de PSOE y BNG de 2007 a 2010 y el del PP en 2011 y 2012, año en el que los populares comienzan a reclamar documentación adicional a la concesionaria y a sospechar sobre la veracidad de los cálculos del déficit. Entre 2007 y 2013, las arcas municipales tuvieron que aportar 2,38 millones de euros.

El Gobierno local del Partido Popular inició en 2014 una investigación sobre las cuentas presentadas, pesquisas que continuó Marea Atlántica tras el cambio de color en María Pita. Entre las conclusiones de los informes, el Concello considera que los gastos presentados no estaban "correctamente justificados". Los técnicos apreciaron irregularidades en los datos presentados, así como falta de documentación que no fue aportada a pesar de los numerosos requerimientos efectuados por el Ayuntamiento. Concluyen que Miramar pudo haber aumentado de modo artificial la facturación con el objetivo de generar déficit excesivo.

Entre las anomalías apreciadas por los técnicos municipales figura que, en 2013, los 202.457 euros supuestamente pagados por la empresa a Rúa Real, la compañía contratada para la limpieza del ascensor y el mirador, superaron la facturación que declaró esta, 182.235 euros. Otra de las anomalías detectadas fue que el coste de las horas de limpieza era más elevado que el que se aplica al sector e incluso que este servicio se prestaba hasta 350 días al año durante ocho horas diarias. El Concello ha reclamado en los tribunales el reintegro del exceso de varios años, procedimientos judiciales que continúan abiertos.

Al margen de los procesos judiciales, el Concello y los nuevos gestores, el chef Luis Veira y el hotelero José Blanco Castiñeira, están sentando las bases para una relación entre la Administración y la sociedad más transparente y reforzando el control de los gastos. La Junta de Gobierno Local aprobó ayer una modificación de la concesión de la explotación del ascensor, el mirador y el restaurante, el Árbore da Veira, que mantiene un año más su estrella Michelin.

Los propietarios y los responsables del área de Medio Ambiente han acordado que Miramar de San Pedro presente a partir de ahora cada trimestre, en lugar de cada año, la documentación necesaria para justificar los gastos efectuados durante ese periodo para hacer frente a sus obligaciones en la concesión. La concesionaria , de la que partió la propuesta de cambio, detallará las actividades y su coste, además de los trabajadores y las subcontratas.