El Concello ha iniciado la tramitación para eliminar el copago en los servicios básicos de ayuda a domicilio. Sería una supresión universal, que beneficiaría a los usuarios de las modalidades de atención "básica, dependencia y sociosanitaria". No es una decisión que se pueda aplicar directamente. Requiere de mayoría absoluta en el pleno, primero, para aprobar la ordenanza fiscal que fija la tasa. Segundo, porque después habría que incluir en el presupuesto una partida para asumir esas cantidades que deberían pagar los usuarios. Pende, sobre la modificación, una incertidumbre legal: si se puede aplicar al tratarse de un servicio y una tasa que gestiona el Concello pero que está reglamentada por la Xunta.

La Asesoría Jurídica municipal dice que sí, según figura en la documentación con la que se sentarán mañana a hablar el alcalde, Xulio Ferreiro, y las dos portavoces del PSOE y el BNG, Yoya Neira y Avia Veira, para poder llevar a pleno con garantías de aprobación la modificación de la ordenanza 18, que regula el copago. Es el Gobierno gallego quien reparte entre los Concellos la financiación estatal en forma de una serie de horas para el servicio. Son los ayuntamientos los que gestionan el servicio y a los que decretos autonómicos obligan a cobrar esa cantidad.

A falta de saber la opinión preceptiva del interventor y el secretario municipal, la Asesoría Jurídica entiende que, con la imposición del copago a través de estos decretos, la Xunta infringe "la legalidad, por cuanto invade las competencias que corresponden a las entidades locales para crear y determinar los elementos de las tasas que se recauden por la prestación de servicios de titularidad municipal". Un informe anterior al que remite el departamento legal señala que cualquier actuación de la Xunta en estos términos "debería ser contestada mediante la consiguiente impugnación" que acabaría como un recurso indirecto contra la reglamentación autonómica.

El informe considera que, en el ejercicio de su competencia para regular la tasa por prestación de servicios sociales y según su interpretación de la ley gallega de servicios sociales, "nada impide" que el Concello pueda asumir el coste del servicio. Advierte de que, al tratarse de un servicio esencial, tiene que garantizar que sea universal y que haya fondos suficientes para atender a todo el que lo solicite.

El alcalde, Xulio Ferreiro, y la edil de Xustiza Social, Silvia Cameán, anunciaron ayer en el centro Boandanza el inicio de la tramitación para eliminar totalmente el copago en la ayuda del hogar, que atiende anualmente a 1.400 personas. En 2017 se cerró el año con 550.792 euros de derechos reconocidos por este concepto. "Hoy vamos a dar inicio al cumplimiento de una medida más de carácter social, que nos convierte en la ciudad que más apuesta por las políticas sociales", celebró el regidor, "los datos están ahí, el Concello invierte más de 100 euros por habitante en políticas sociales, algo que le queda muy lejos a otras ciudades del país". Ferreiro señaló que llevan trabajando "muchos meses" para poder "armar la acción jurídicamente y elaborar un expediente del que se van a beneficiar muchas familias".

Según informó, el expediente de la propuesta se ha enviado al Tribunal Económico Administrativo Municipal. Una vez que se tengan los pertinentes informes y la resolución del propio tribunal, la propuesta pasará por la junta de gobierno y comisión antes de someterse a la votación del Pleno.