El sindicato GTT, de la Compañía de Tranvías, que cuenta con cuatro de los nueve miembros del comité de empresa, se queja de la decisión del Gobierno local de rebajar el precio del billete del bus a los usuarios en diez céntimos.

Alertan de que esta medida no revertirá en la mejora del servicio, ya que se mantendrán las mismas líneas y frecuencias y solicitan que se mantenga el precio del billete y que el superávit de la concesionaria del servicio repercuta en la modernización de la flota, así como en medidas que mejoran la vida de los usuarios del bus y de los trabajadores.

Proponen que todas las paradas cuenten con una pantalla que anuncie el tiempo que tardará el bus en pasar y que algunas de las cabeceras de las líneas cuenten con baños para que los empleados puedan utilizarlos durante su jornada laboral. Piden también la eliminación de obstáculos en las paradas y alertan de que esta rebaja en el precio del billete ocasionará "un deterioro grave del servicio que se realiza actualmente" y de que esta medida "coartará las futuras negociaciones entre la plantilla y la empresa".

El sindicato ha pedido una reunión con el concejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz Grandío, previa a "emprender movilizaciones" u otras medidas contra la bajada del bus.