Toni Lodeiro, el coruñés simpatizante de Marea Atlántica al que el Gobierno local compró en concurso público dos pisos destinados a alquiler social, rompió ayer un año de silencio a través de un comunicado para criticar a la Corporación municipal al completo y admitir que en este tiempo el conflicto le ha causado "daños personales y ciudadanos". La Fiscalía Provincial archivó el mes pasado, sin presentar querella, las diligencias de investigación abiertas a raíz de la denuncia de los populares por falta de "trascendencia penal" en las irregularidades que habían denunciadoFiscalía Provincial.

Señalado por el grupo municipal del PP por su afinidad a la Marea Atlántica, Lodeiro rechaza haber sido favorecido por sus simpatías con Marea, en la que, asegura, no ha ocupado cargos orgánicos ni recibido salario; censura una "campaña política, administrativa y mediática" de acoso "impulsada" por el PP; y acusa a los grupos del PSOE y el BNG por sumarse a esa campaña por "oportunismo" y "motivos electoralistas". Las mismas razones atribuye al Gobierno local, al que reprocha haberse "situado de perfil ante el conflicto", actuar "con miedo al daño electoral" por defender los intereses de un afín, no dirigirse a él para explicarle la situación y evitar proteger su derecho a participar en un proceso como el de la compra de vivienda "sin ser penalizado por su compromiso político, sea cual sea". Por ello se dirige al Ejecutivo local para que "asuma consecuencias" si hubo errores administrativos y avanza que "seguirá luchando en los tribunales para hacer valer sus derechos".

El propietario de los pisos recuerda que los funcionarios desmintieron "contundentemente" las acusaciones vertidas por el PP y alude a la resolución de la Fiscalía de archivar la causa para reiterar que no recibió trato de favor por parte de Marea. El fiscal, además, advirtió un cambio de uso, de local a vivienda, en un piso contiguo a uno de los denunciados por el PP durante el Gobierno de Carlos Negreira, por lo que anunció la apertura de otra investigación.

"He guardado silencio durante un año porque me ha costado mucho digerir todo lo que ha sucedido y no quise alentar un proceso que, por ser totalmente falso, creía que caería por su propio peso", explica. "Después de meses buscando se encontraron en el concurso errores técnicos generalizados y no restringidos a mi caso", apunta Lodeiro, quien señala que "en el peor de los casos" podría tener que recuperar los pisos y devolver los 145.865 euros que le pagó el Concello, un dinero del que ya no dispone al haber comprado una vivienda en la comunidad donde reside, Cataluña.

Solo el BNG reaccionó ayer al escrito. Su portavoz local, Avia Veira, reitera que la postura de su formación fue "absolutamente responsable en su tarea de control al Gobierno y respetuosa con la afiliación del afectado".

La junta de gobierno acordará hoy abrir una nueva revisión de oficio a la adquisición por parte del Concello de otro de los pisos en el mismo concurso, en la calle Barrera, al haber caducado el procedimiento de revisión anterior.