El XXII Salón Internacional del Cómic Viñetas desde o Atlántico llega a su fin con éxito de afluencia después de una semana de charlas y actividades en la que los aficionados se sumergieron en las vías alternativas del mundo del cómic, aunque las exposiciones seguirán abiertas hasta el 8 de septiembre.

La cita cultural imprescindible año tras año en A Coruña acogió esta vez las charlas de nueve conocidas figuras relacionadas con del mundo del cómic, uno de ellos coleccionista, y el resto creadores que en algún momento de su carrera decidieron dar un giro de 360 grados a su obra.

A esta apuesta por los títulos que no están en la primera fila de las librerías, que no están en boca de todos, pero que tienen una enorme calidad, el director de Viñetas desde o Atlántico, Miguelanxo Prado, les ha llamado “carreteras secundarias”, en las que uno se puede sentir aún más cómodo que en una autopista.

Hablar con autores internacionales, observar sus obras originales, y descubrir la situación del cómic a nivel mundial es lo que ha llevado a coruñeses y visitantes a entrar en la sede de las actividades, el Kiosko Alfonso, y en las exposiciones repartidas por diferentes puntos de la ciudad.

Entre los invitados de esta edición, el portugués Jorge Coelho explicó la gran responsabilidad que supuso dar el salto a Estados Unidos y trabajar para Marvel, mientras que el madrileño Antonio Navarro desgranó el proceso de creación de su cómic Homónimos (Norma Editorial), un viaje por las aventuras de ocho tocayos del autor.

El mexicano Tony Sandoval narró el viaje que hizo al cruzar la frontera de Estados Unidos sin papeles, reflejado en Cita en Phoenix (Dibbuks), e Isabel Greenberg acercó al salón su primera saga y sus fábulas feministas.

La complicidad entre los mundos del cómic y la poesía tuvo lugar de la mano de la gallega Yolanda Castaño con su obra O puño e a letra (Xerais) en la que cuarenta ilustradores convirtieron sus poemas en viñetas, mientras que el también gallego Abel Alves reveló los entresijos de su obra Segunda Venida (Dibbuks).

El francés David Sala puso de manifiesto la denuncia desgarradora y desesperada de la barbarie nazi con la adaptación literaria El jugador de ajedrez (Astiberri Ediciones), mientras que Albert Monteys relató su reinvención en el mundo digital con ¡Universo! (Astiberri Ediciones).

No obstante, el salón también se apartó de las 'carreteras secundarias' para celebrar el 90 aniversario del nacimiento de Tintín, de la mano del coleccionista Pedro Rey, que muestra una recopilación de objetos y obras, en sus diferentes traducciones a 121 idiomas y dialectos de todo el mundo.

El humor ambiental del ilustrador Juan López Rico también ha estado presente, con la presentación de su antología “¡Houston, tenéis un problema!”.

Asimismo, la ONG Amnistía Internacional ha repartido más de un millar de ejemplares de la obra Nai dos Desterrados (Madre de los Desterrados), con el objetivo de sensibilizar sobre la situación de los derechos humanos.

El festival Viñetas desde o Atlántico, totalmente libre y gratuito, se celebra en A Coruña anualmente en el mes de agosto desde el año 1998 y está dentro de las actividades de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de A Coruña.