La residencia de Padre Rubinos será la segunda de Galicia en contar con plazas públicas para personas sin hogar, hasta ahora solo disponibles en el centro Santa Olaia, en Boqueixón. La Consellería de Política Social informó ayer que la instalación coruñesa contará con 11 plazas para estas personas, que serán financiadas por la Xunta y cuyos beneficiarios deberán participar en un proyecto de inclusión social y laboral.

Los seleccionados para ocupar estas plazas no tendrán una permanencia limitada en Padre Rubinos, como sucede con el resto de los usuarios. Política Social pretende ofertar 21 plazas más en la comunidad entre finales de este año y principios del próximo, para lo que aumentará un 37% los fondos destinados a centros de acogida en el presupuesto autonómico de 2020.

El objetivo para los próximos cuatro años es alcanzar las 70 plazas. La consellería prevé destinar el próximo año a la inclusión social 120 millones de euros.