La titular del juzgado Contencioso-administrativo número 4 de A Coruña ha autorizado el desalojo forzoso de la fábrica de armas de la antigua concesionaria, Hércules de Armamento. El Ministerio de Defensa, que había solicitado la ejecución del desahucio en octubre pasado tras revocar la concesión, recuperará la instalación industrial de forma temporal, hasta que haga oficial la nueva adjudicación a la Universidade da Coruña (UDC), promotora junto al Clúster TIC de Galicia de un polo de innovación tecnológica en parte de los terrenos que ocupa la planta en Pedralonga, bautizado como Ciudad de las TIC.

A partir del auto judicial emitido este miércoles y notificado ayer a Hércules y a la Abogacía del Estado, el desalojo podría producirse en horario diurno dentro de los próximos 30 días. Fuentes próximas al proceso por el cual se cambiará de concesionario sitúan el desahucio en la segunda semana de febrero.

La emisión del auto coincide con el anuncio, por parte del presidente de la Xunta, de que el Gobierno gallego descarta las parcelas de Pedralonga como emplazamiento del nuevo complejo hospitalario de A CoruñaPedralonga . Al elegir la Xunta la ampliación en los terrenos adyacentes a la actual ubicación del hospital, la fábrica de armas queda a disposición del que será su nuevo concesionario, la UDC.

Todas las administraciones „incluso el presidente del Gobierno en persona, Pedro Sánchez, en la campaña de las municipales de mayo pasado„ han dado su respaldo al desarrollo de la Ciudad de las TIC. El único obstáculo que la Universidad ha tenido para poner en marcha su proyecto tecnológico ha sido Hércules de Armamento, que durante el año pasado se negó a marcharse y agotó todos los plazos legales para presentar alegaciones contra el desalojo, primero voluntario y luego forzoso, ordenado por Defensa.

El Ministerio, apoyado en un informe del Consejo de Estado, promovió en 2019 el abandono de la empresa, instalada desde finales de 2014 tras ganar el concurso público y sin actividad industrial desde el año siguiente, por no abonar el canon anual de uso de la factoría y acumular impagos a los trabajadores y deudas con Hacienda y la Seguridad Social. El último trámite para resolver la orden ministerial ha sido el juzgado coruñés, que desestima las alegaciones de Hércules y ordena que Defensa "recupere la posesión del bien demanial del Estado".

Aunque la UDC aún no ha podido hacer uso de las instalaciones de la fábrica de armas, en este tiempo ha consolidado sus contactos con las empresas tecnológicas de A Coruña y su comarca con el fin de asentarse en el futuro parque de innovación. Al mismo tiempo, ha acordado con Defensa los términos en que se procederá a la concesión demanial de la planta, que se oficializaría en las próximas fechas.

Hasta ese momento el Ministerio volverá a inspeccionar el interior de la fábrica para comprobar el estado en que se encuentra la maquinaria. También será necesaria la contratación de seguridad hasta el momento en que la UDC utilice las instalaciones como nueva concesionaria. El contrato por el que Hércules explotó la planta de Pedralonga obliga a la concesionaria a entregar el equipamiento tal como se le adjudicó, pero hay que tener en cuenta que durante más de tres años no ha habido actividad industrial en la fábrica.

La portavoz de Ciudadanos, Mónica Martínez, instó ayer a "avanzar en el desarrollo" del parque tecnológico de Pedralonga y ha convocado para el próximo viernes la comisión especial de la Ciudad de las TIC para conocer en qué estado se encuentra el proyecto.