La Junta de Gobierno Local aprobó ayer la puesta en marcha del plan de choque de limpieza viaria, una promesa electoral de los socialistas, con un presupuesto de 256.000 euros, frente a los 623.000 en que se había presupuestado inicialmente. La razón de esta rebaja del 40% es que la actuación que se llevará a cabo será solo una primera fase que se desarrollará a lo largo de 30 días laborables repartidos en seis semanas, cuando el cálculo total del plan establecía 50 jornadas de trabajo.

La intervención se realizará a cargo de la empresa pública Tragsa en el centro y en los barrios de Monte Alto, Matogrande y Agra do Orzán por ser los que un estudio señaló como más necesitados de una actuación de este tipo. La concejala de Medio Ambiente, Esther Fontán, explicó que tras esta primera fase, el plan será completado a partir de octubre por la nueva concesionaria de la limpieza viaria, aunque eso supondrá que lo realizará con cargo al contrato para la prestación del servicio y no mediante la partida prevista para esta actuación extraordinaria.

A la argumentación aportada inicialmente por el Gobierno local para justificar la realización de esta iniciativa, la existencia de un nivel de suciedad elevado en numerosas zonas de la ciudad, en los últimos meses se añadió la situación sanitaria generada por la pandemia, que exige una limpieza más intensa, así como los retrasos que sufren los nuevos contratos municipales de limpieza viaria y recogida de residuos.

El plan de choque será llevado a cabo con la intermediación de la Diputación, ya que al ser accionista de Tragsa puede encomendarle actuaciones como esta tras el convenio de colaboración que firmará con el Concello. Esta fórmula permite al Gobierno local eludir la convocatoria de un concurso que demoraría la puesta en marcha de la operación, aunque ha generado el rechazo del resto de grupos de la Corporación.

Los socialistas sacarán adelante esta iniciativa porque el convenio con la Diputación no precisa del respaldo del pleno, en el que toda la oposición respaldó en mayo una moción de Marea Atlántica que reclamaba la retirada del plan de choque, al que consideraba "electoralista". Los recursos para financiar el plan proceden de partidas destinadas a limpieza viaria que no serán necesarias debido a que el nuevo contrato para esta actividad requerirá de una menor aportación de fondos.

De acuerdo con el dispositivo organizado por el Gobierno local, el plan de choque se desarrollará entre las 07.00 y las 15.00 horas durante las seis semanas que durará la primera fase que en principio se realizará. Un equipo de 21 personas, de los cuales seis son conductores, se encargará de los trabajos de limpieza, en los que se utilizarán tres máquinas baldeadoras, tres camiones cisterna y cuatro vehículos ligeros.