El concejal de Marea Atlántica Xiao Varela ha anunciado esta mañana su renuncia al acta que le otorga un asiento en el salón de Plenos de María Pita.

Asegura que es una decisión "meditada y deseada" y que su último pleno será el del mes de octubre.

Ha comunicado ya su decisión a Marea Atlántica y también a la alcaldesa, Inés Rey.

Varela fue concejal de Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda durante el mandato de Xulio Ferreiro como alcalde.

Tras comunicar su decisión, Varela ha colgado una carta en redes sociales en la que explica las razones de su renuncia y en la que agradece la colaboración no solo a sus compañeros de formación sino también a los funcionarios y funcionarias con los que trabajó durante estos cuatro años y quince meses en María Pita.

Explica que, tras la pérdida de la Alcaldía, defendió "sin éxito" en el proceso interno de Marea Atlántica la entrada de la formación en el Gobierno local, en coalición con el PSOE, una idea que no fructificó, finalmente, ya que el PSOE cerró la puerta a esa posibilidad.

"Pensaba que era la mejor manera de dar continuidad a las políticas que estábamos desarrollando y porque me parecía la única manera de evitar una posible deriva conservadora del gobierno del PSOE que, desgraciadamente, se está confirmando", ha escrito Varela, que asume que, durante su mandato hubo "muchos aciertos y algunos errores".

Reivindica que entiende la política "desde el diálogo, el respeto y la búsqueda de acuerdos" y asegura que, actualmente, en María Pita se camina "hacia un escenario de confrontación entre las fuerzas progresistas, en gran medida motivada por las dinámicas y los actos del actual Gobierno", por lo que considera que, "cada día" queda "un margen más estrecho para el entendimiento".

Marea Atlántica ha criticado duramente este mes por la incorporación de la exconcejal de Ciudadanos, Mónica Martínez, como titular del área de Deportes, al considerar que da "un giro a la derecha" con esta actuación.

Tras cuatro años de gobierno y quince meses en la oposición, Varela asegura que ha acusado "el cansancio acumulado" y es por ello por lo que considera "que es mejor no continuar". Esta decisión está en sintonía con su idea de que había entrado en política "por un tiempo limitado" y mientras se sintiese "útil para la ciudad". Este paso al lado no significa que vaya a dejar su activismo, ya que anuncia que seguirá "trabajando por la ciudad e involucrado en la política", pero ya sin sillón en el salón de plenos.

Para despedirse, dice también que fue "un privilegio y un placer" trabajar "en la mejora de A Coruña" y asegura que le alegra "poder pasear por la ronda de Nelle sin la sombra del viaducto" y haber "frenado la especulación o la privatización del borde litoral".

Tras la carta de despedida de Varela, Marea Atlántica también ha publicado una nota en su web, en la que asegura que el camino compartido "siempre será motivo de orgullo".

Marea lamenta la marcha de Varela y destaca, de su mandato, que fue una "figura decisiva para que el problema del parque ofimático se transformase en un barrio habitado", además de por "fomentar la rehabilitación".

Durante el mandato de Varela se produjo el concurso público para la adquisición de pisos que se iban a dedicar a vivienda social y que, finalmente, fue anulado casi en su totalidad porque los inmuebles no se ajustaban a las bases publicadas.