Miguel Ferrero Cuesta es el nuevo jefe de la Brigada Seguridad de Ciudadana del Cuerpo Nacional de Policía en A Coruña, donde Pedro Agudo Novo acaba de incorporarse al cargo de jefe de la Brigada de Policía Judicial. Ambos nombramientos para puestos de comisario suponen un notable refuerzo en la cúpula policial coruñesa, en la que hasta el momento de los siete cargos de este nivel existentes solo estaba cubierto el puesto de jefe de la Brigada Provincial de Información, que se jubilará el próximo mes de abril, y el de jefe superior de la policía de Galicia. En la actualidad permanecen vacantes los puestos de jefe regional de Operaciones, comisario provincial, jefe de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras.

Miguel Ferrero lleva más de quince años destinado en A Coruña tras haber prestado servicio en Cataluña. Durante su trayectoria profesional trabajó en especialidades como Seguridad Ciudadana y de Policía Judicial y fue jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta.

Los comisarios que se nombran cada año se trasladan a los pocos meses

Pedro Agudo, de origen coruñés, desempeñó casi toda su carrera en Madrid y fue además agregado del Ministerio del Interior en la Embajada de España en Italia. También prestó servicio en la Dirección General de Seguridad de la Comunidad de Madrid, fue jefe de gabinete del director general de la Policía, trabajó en el departamento de Personal y responsable de la Unidad de Policía Judicial de los Juzgados de la plaza de Castilla y aprobó el año pasado la oposición a comisario.

Fuentes policiales señalan que la comisaría coruñesa padece una carencia crónica de profesionales de este nivel, ya que los comisarios que se nombran al principio de cada año son trasladados al cabo de unos pocos meses, lo que repercute de forma negativa en la organización de los servicios y la planificación de las actividades. El hecho de que uno de los ahora nombrados lleve más de tres lustros de permanencia en A Coruña y de que el otro tenga sus raíces en la ciudad hace concebir esperanzas de que su estancia sea prolongada.