Un pescador deportivo, de 32 años, falleció ayer tras ser arrastrado por un golpe de mar cuando se encontraba en una zona rocosa de O Portiño con un amigo, que fue quien alertó al 112 de la desaparición. Fue aproximadamente a las once de la mañana cuando Salvamento Marítimo recibió el aviso y puso en marcha un operativo de rescate.

También acudieron al puerto patrullas de la Policía Nacional y Local, Guardia Civil, Urxencias Sanitaria y Gardacostas de Galicia, así como la sección acuática de los Bomberos, que trataron de recuperar el cuerpo del pescador, sin éxito, por lo que tuvo que intervenir el helicóptero de Salvamento Marítimo, el Helimer, ya que el cadáver se encontraba en una zona de rompientes, que aconsejaba el rescate por aire.

El amigo del fallecido, que se encontraba pescando con él, aseguró a algunos testigos que “de repente” no vio a su amigo, por lo que llamó al 112 para alertar de lo ocurrido. Fuentes de los equipos de emergencia explican que se cree que a la víctima “se le enganchó el anzuelo y al intentar cogerlo, vino una ola y le dio un golpe contra las rocas”.

Vecinos de O Portiño y pescadores de la zona aseguraban ayer, minutos después del suceso, que “murió del golpe, porque si se ahoga, se va para el fondo”. Junto al amigo, en el puerto, se encontraba también la mujer de la víctima, que se llevaba las manos a la cara para esconder las lágrimas.

Un vecino de la zona, habitual en Suevos, Rubén Marcos Suárez, explicó que la zona rocosa en la que se encontraban pescando los dos amigos “es muy peligrosa”, sobre todo con el aviso por viento fuerte y oleaje que se activó ayer. “Entendemos que son inexpertos porque cualquiera que conozca el mar, no sale hoy —por ayer— a pescar”, reflexiona el joven, que se ofreció a salir con su lancha a recuperar “la mochila y la cazadora” del pescador, que seguían en el mar. “Pero los servicios de emergencias y la policía nos lo desaconsejó”, añadió.

Suárez acudió a O Portiño en cuanto se enteró de la noticia “por varias llamadas de amigos”, pero aseguró que tanto él como sus compañeros, que suelen pescar en esta zona, “no conocían” a la víctima. El joven comentó que “hace solo unos meses ocurrió algo parecido, pero un hombre con una tabla de surf consiguió rescatar a la persona que había caído al mar”. “Es una zona complicada que engaña mucho”, concluyó.