El cierre de los locales de ocio nocturno a causa de las restricciones impuestas por la situación sanitaria generada por la pandemia ha provocado que los delincuentes especializados en los robos de carteras, bolsos y teléfonos móviles en esos establecimientos se hayan pasado en los últimos meses a las sustracciones en masa de objetos en el interior de vehículos. Según fuentes policiales, las denuncias por robo con fuerza en automóviles han aumentado un 150% y estos hechos se producen especialmente en las dos fases del polígono de Elviña, Agra do Orzán, Labañou, Os Mallos, Sagrada Familia y Riazor.
Los delitos son cometidos por bandas delictivas de origen extranjero y para cometerlos recurren en la mayoría de los casos a la rotura de los cristales de las ventanillas o a al pinzamiento de la puerta, aunque también llegan a utilizar inhibidores de la frecuencia de los cierres electrónicos de los vehículos.
Otra de las modalidades de robo que practican estos delincuentes es la del descuido, para lo que aprovechan la salida de los conductores de los vehículos para realizar gestiones breves o recoger a niños en los colegios, ocasiones en las que es frecuente que se dejen las puertas abiertas, lo que facilita a los ladrones que se apoderen de objetos del interior de los coches.
Esta fórmula también es empleada con las furgonetas utilizadas por las empresas para el reparto de compras o el transporte de herramientas o materiales, que frecuentemente quedan abiertas en las paradas efectuadas por sus conductores, que así se convierten en víctimas de estos delincuentes.
Los robos en los establecimientos de ocio nocturno eran una práctica habitual en las zonas de la ciudad con una mayor presencia de esta clase de locales, lo que llevaba al Cuerpo Nacional de Policía a mantener una vigilancia continua en estos lugares durante las noches de los fines de semana con agentes de paisano para evitar la comisión de estos delitos. Esta labor preventiva se desarrollaba también en las grandes aglomeraciones de personas motivadas por espectáculos al aire libre como conciertos o fiestas como la de la noche de San Juan, en las que la proximidad de unas personas a otra y la pérdida de la atención sobre pertenencias como teléfonos, carteras y bolsos favorecen la actuación de los ladrones, por lo que los agentes tratan de localizarles entre la multitud. Para ello se benefician de que la mayoría de ellos son multireincidentes y de la experiencia de la policía en la lucha contra esta especialidad delictiva.
Asalto en tienda
Una tienda de moda de la calle Médico Rodríguez fue víctima de un asalto durante la noche del martes, ya que los propietarios del establecimiento se encontraron la puerta forzada a primera hora de la mañana de ayer cuando la Policía Local les llamó para advertirles de que se había cometido un robo.
La cerradura mostraba signos de haber sido manipulada, mientras que el marco de la puerta y la pared del establecimiento presentaban daños producidos por los ladrones, quienes tan solo se apoderaron del cambio que había en la caja registradora.
