Una de las viviendas que forma parte de la Colonia de Casas Baratas Juan Canalejo diseñada por el arquitecto coruñés Óscar Pedrós figura entre las finalistas de los premios del Colexio Oficial de Arquitectos de Galicia en la modalidad de viviendas unifamiliares de nueva planta. El autor, secretario de la delegación coruñesa del colegio profesional y profesor de la Escuela Superior de Arquitectura, apostó por mantener la imagen exterior de la única planta con que contaba la casa y por añadirle una más cuya fachada está compuesta por un gran ventanal cubierto en verano por una parra vertical.

La vivienda que acaba de reformar está en la colonia Juan Canalejo, un conjunto muy singular en A Coruña.

Creo a que muchos coruñeses nos traen muchos recuerdos esas casitas con arco que en realidad es un dintel. Aparte de esa imagen, la colonia tiene de especial que fue rodeada por edificación de una gran densidad, por lo que quedó como una especie de isla. Eran casas con un pequeño jardín y con ventilación cruzada para favorecer la salubridad, lo que les daba un carácter especial, junto con un sentido de unidad que hacía que fueran concebidas como un barrio. Estas casas están protegidas pero no catalogadas, pero no creo que haya que proteger todo, porque si en la colonia hay casas de dos plantas al lado de otras de una en las que no se pudiera añadir otra, probablemente tendrían más dificultades para renovarse.

¿Cuál es la razón del diseño elegido? ¿Tenían los propietarios una idea preconcebida?

Tengo que agradecer la confianza que depositaron en la profesión de arquitecto porque su idea original estaba condicionada por las casas de alrededor que rompen con el lenguaje original del barrio. En ese proceso de reflexión les dije que quizás no tenían interiorizada la imagen de la planta baja con ese arco, pero que sería interesante que en el futuro quien pasase por aquí pudiese tener un recuerdo como el que tenía yo de niño de lo que era antes la colonia, aunque sin interferir con la posibilidad de ganar una altura. Esa idea, al igual que los materiales elegidos, al principio no resultaba fácil, pero con una propuesta en maqueta fueron entendiendo que podía ser una casa diferente que mantenía el respeto por lo que había y que les permitía tener dentro lo que ellos querían.

¿Es importante la sensibilidad de los propietarios al poner en marcha un proyecto como este?

La sensibilidad y la confianza, porque es la inversión de su vida, por lo que en ese proceso de reflexión es necesario despojarles de ideas preconcebidas.

La planta baja conserva prácticamente su aspecto original, mientras que en la superior la fachada consiste en un gran ventanal.

En la fachada de la planta baja se reproduce el lenguaje original de la colonia Juan Canalejo. Podríamos decir que es historicista porque reproduce una situación anterior en una época diferente, pero también puede pensarse que cuando Juan González Cebrián diseñó estas Casas Baratas ese arco fuese un pintoresquismo. Los recursos que se acumulan tienen sentido cuando reflejan una unidad, ya que de forma separada no tendrían sentido. Por eso parecía interesante mantener ese lenguaje, pero con un nuevo material porque la construcción era muy humilde, de forma que se recurrió al hormigón porque permite mantener ese tipo de arco y la única modificación que se hizo en la fachada fue que al hueco alargado se le dio carácter abierto a la ventana en vez de fragmentarla. La parte superior tiene un lenguaje mucho más abstracto para dar valor a lo que queda debajo y aprovecha que mira al sur para experimentar con un sistema basado en una parra plantada en el macetero de la cornisa, que protege de la insolación en verano y proporciona luz en invierno a los dormitorios de esa planta.

¿Es una idea original este tipo de parra vertical?

Es un recurso que se ha utilizado en la arquitectura más vernácula porque las parras siempre dieron sombra en verano a los accesos a las viviendas o a los jardines y en invierno permitieron calentarse con el sol. En vertical no es la primera vez que se utilizan pero en A Coruña no se ha visto, aunque hay experiencias en arquitecturas contemporáneas en las que, ya sea una parra, una hiedra u otro elemento vegetal, se antepone a un elemento acristalado.

Ese ventanal debe proporcionar una gran luminosidad al interior.

Sí, le da mucha luz. La parra le va a proporcionar además al barrio ese punto verde que le falta a muchas zonas de A Coruña, y además en contraste con el hormigón, para aquellos que puedan pensar que la casa es un elemento quizás demasiado gris o duro, ya que la da un toque mucho más humanizado.

En el interior la escalera parece que tiene un papel fundamental en la vivienda.

Es un gesto casi inconsciente que nace del problema de crear una planta más manteniendo la posición del hueco de acceso, ya que al distribuir los espacios y las plantas lo que lo facilita es cómo se desembarca a ella a través de la escalera. El pliegue que tiene está precisamente motivado por una necesidad racional.

¿Ha escuchado comentarios en el barrio sobre la vivienda?

Hay gente que se paraba a hablar con los propietarios y estos les explicaban. Yo creo que están contentos, aunque hay otras visiones que piensan que por utilizar un determinado material, el hormigón, la arquitectura pierde valor, cuando lo que permite es mantener las formas originales, que además, gracias a la parra, se equilibran con ese elemento verde.

En la colonia Juan Canalejo se han construido muchas viviendas nuevas. ¿Cree que respetan el diseño original de esta zona?

Si entendemos como tipología la vivienda con patio, se podría decir que sí porque la normativa exige que sea así, pero si lo hacemos en cuanto a viviendas pareadas que construían un espacio exterior, la colonia ha sufrido muchísimo los diferentes planes generales que permitieron especular con ese aspecto.

¿Va camino de convertirse en una nueva Ciudad Jardín?

La diferencia con la Ciudad Jardín es que esta tiene unos espacios previos a las viviendas que las camuflan. También en ella se han modificado las tipologías, aunque seguimos percibiéndola como Ciudad Jardín, mientras que esto no lo es, sino una colonia de casas directamente relacionadas con la calle que no tienen ese espacio de amortiguamento, que es lo que la hace especial.