El conductor kamikaze que el pasado 24 de diciembre circuló en A Coruña por un tramo de Alfonso Molina en sentido contrario ha sido identificado por la Guardia Civil de Tráfico. Se trata de un vecino de Culleredo que ese día de Nochebuena no pudo ser interceptado cuando condujo hacia A Coruña por los carriles reservados para el tráfico de sentido salida pero ahora sí ha sido identificado y localizado por el Grupo de Investigación y Análisis del Tráfico (GIAT) del Sector de Tráfico de la Guardia Civil de Galicia. El hombre está investigado como presunto autor de un delito contra la seguridad vial.

Los hechos ocurrieron a raíz la circulación de un vehículo kamikaze en sentido contrario al flujo establecido a las 23:30 horas del pasado día 24 de diciembre, Nochebuena, entre los kilómetros 2,900 y 3,900 de la carretera AC-11 --denominación oficial de la avenida de Lavedra y Alfonso Molina--- vía principal de acceso a la ciudad de A Coruña, dicha acción fue grabada por un testigo que alertó inmediatamente a los servicios de emergencias. La Guardia Civil inició una investigación para la localización del vehículo y la identificación de su conductor, contando para ello con la inestimable colaboración del Centro de Gestión de Tráfico del Noroeste (CGT), el cual aportó a la misma las imágenes de sus cámaras de control y la colaboración de sus funcionarios.

Un agente de la Guardia Civil de Tráfico revisa las imágenes de las cámaras que grabaron al conductor kamikaze en Alfonso Molina. Guardia Civil

Durante el visionado de imágenes los efectivos del GIAT observaron como este vehículo circulaba en sentido contrario al flujo establecido por una zona con trazado sinuoso y con numerosas intersecciones, haciendo caso omiso de las señales luminosas que le realizaban los vehículos que circulaban en sentido correcto, cuyos conductores se veían obligados a realizar maniobras para lograr esquivarlo.

Tras el análisis minucioso de la información recabada, los componentes del GIAT lograron la localización del vehículo y la identificación plena del conductor kamikaze. La Guardia Civil procedió a la investigación de esta persona, un hombre vecino de Culleredo, como presunto autor de un delito contra la seguridad vial por conducir de forma temeraria con absoluto desprecio por su integridad y la de los demás usuarios de la vía, lo que acarrearía en caso de condena una pena de 6 meses a 2 años de prisión y la privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores de uno a 6 años. La Guardia Civil recuerda que intensificará la vigilancia y control para localizar e identificar a este tipo de conductores cuyas conductas afectan clara y directamente a la seguridad vial, poniendo en riesgo la integridad de todos los usuarios de la vía