Dos astronautas en A Coruña a la conquista del espacio

Pedro Duque y Sara García participan en unas jornadas en torno a las posibilidades del sector y las misiones espaciales del siglo XXI

Hace unas décadas parecía imposible llegar a la Luna, y se hizo. Cabe imaginar que el siguiente paso lógico, por proximidad, es el planeta rojo. ¿Tiene España posibilidades de llegar a Marte algún día? Quienes han tenido oportunidad de observar la Tierra desde fuera no cierran la puerta. “Depende de si ponemos suficiente gente a trabajar en ello”, valoró, desde la terraza del Palexco, el astronauta y exministro de Ciencia Pedro Duque, que auguró que, una vez esté probada la tecnología “y sepamos qué hacer con el oxígeno, como hacer que las cosas sigan siendo herméticas, y cuando los sistemas estén probados”, puede que el mundo se asome a una nueva carrera espacial con destino a Marte.

Esta y otras perspectivas y retos en la investigación científica centrada en el ámbito aeroespacial fueron algunos de los temas que salieron a colación este lunes en las jornadas Presente y futuro de la investigación aeroespacial: investigación, emprendimiento y colaboración público-privada, organizada por el Consello Social de la Universidade da Coruña y patrocinada por Inditex. “Esto siempre ha sido una competición de tecnología. ¿Quién irá primero a Marte? Como todos queremos explorar, eso es lo que impulsará la aparición de presupuestos”, detalló el astronauta.

Junto a Duque, que centró sus intervenciones en la importancia de la inversión en ciencia e innovación para el progreso de un país, pilotó las intervenciones la astronauta reserva de la Agencia Espacial Europea, Sara García, que detalló el arduo proceso de selección para llegar a ser astronauta y abordó las futuras misiones en la órbita terrestre, a saber, la Luna y Marte. Un ámbito, el de la conquista del espacio, en el que, puntualizó García, España va ganando presencia poco a poco, y un cometido que ha visto multiplicada por dos su inversión en el último mandato.

“La contribución de España a la Agencia Espacial Europea en la última ministerial ha sido la más alta, y eso quiere decir que se está invirtiendo en el sector aeroespacial. Hay empresas y entidades que están siendo muy potentes en temas aeroespaciales, en satélites, en lanzadoras”, comentó García. Una cosa, señalaron, “tira de la otra”: la inversión en innovación invita a la riqueza. “Se trata de poner una semilla para que haya empresas que generen puestos de trabajo de alta remuneración, y se dinero vuelva al Estado con impuestos, por eso los países ricos invierten en innovación. No invierten porque son ricos; son ricos porque invirtieron”, matizó Duque.

La jornada orbitó, asimismo, sobre otros retos que encara en la actualidad la industria aeroespacial, como son las nuevas formas de llegar al espacio, la optimización de la eficiencia de los sistemas y el universo de posibilidades que trae para la sociedad. “Hay sistemas que permiten que pueda dar internet a todo el mundo, estés donde estés. Esto es una nueva forma de alcanzar el espacio. Resultan de interés los sistemas de observación de la tierra que te dan fotos casi en tiempo real, así puedes ver los incendios, las cosechas. Por supuesto, la exploración de la humanidad. Tenemos que seguir explorando”, animó Duque.

Un ámbito de conocimiento en el que la Inteligencia Artificial, palabra (o palabras) del año en A Coruña tras la consecución de la sede de la Agencia Estatal de Supervisión de la inteligencia Artificial (Aesia), puede jugar también su papel, tal y como detalló Sara García, que pudo visitar las instalaciones del Centro de Investigación TIC, un referente en la generación y transferencia de conocimiento en torno a esta tecnología. “Es una tecnología tan transversal que va a afectar en todos los sectores, y el ámbito del espacio no va a ser una excepción. Uno de los proyectos sobre observación de la tierra de la Agencia Espacial Europea tiene que ver con la construcción de un gemelo digital de la tierra, para hacer simulaciones de modelos o implantaciones para mejorar o gestionar el cambio climático”, ejemplificó la astronauta.

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