Discos de la semana

Lucinda Williams planta cara a la vida con 'Stories from a rock'n'roll heart'

La cantautora de Louisiana responde al ictus que sufrió en 2020 con un álbum vitalista y meditativo en el que invoca los poderes del rock junto a colegas como Springsteen y Angel Olsen

Los nuevos elepés de Triángulo de Amor Bizarro, Lloyd Cole y Meshell Ndegeocello, también reseñados

Lucinda Williams, en la última edición del festival Azkena, en Vitoria.

Lucinda Williams, en la última edición del festival Azkena, en Vitoria. / Ferran Sendra

Jordi Bianciotto / Rafael Tapounet / Roger Roca

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Lucinda Williams 

 Highway 20 / Everlasting / Popstock!

 Rock-folk

★★★★ 

El encuentro más descarnado de la música con la vida y sus incidencias produce obras como ‘Stories from a rock’n’roll heart’, un álbum en el que Lucinda Williams canta a sus fuentes motivadoras y al misterio que sigue envolviendo la creación de canciones. Obra vivificante, envuelta en un halo de victoria dado el delicado camino, de orden clínico, que la precedió.

Hablamos del tornado que arrasó su casa, del covid-19 y, lo peor, del derrame cerebral que sufrió en noviembre de 2020, que le dejó unas limitaciones motrices en el lado izquierdo de las que poco a poco trata de sobreponerse. Nada que la haya frenado: a las pocas semanas del ictus ya estaba actuando de nuevo, y hace unos días se la pudo ver y disfrutar en el Azkena Rock Festival.

Lucinda Williams, herida, pero en absoluto vencida, incapacitada (por ahora) para tocar la guitarra, pero transmitiendo veracidad con su voz de superviviente, con carácter, y luciéndose como autora en las hermosas y desafiantes ‘stories’ que nos cuenta cumplidos ya los 70. Empezando por ese rock clásico abre el álbum, a lo Stones o The Faces, llamado ‘Let’s get the band back together’, en el que suspira por el viejo espíritu del ‘gang’ en la compañía de colegas como Margo Price y Buddy Miller.

Arte al alcance

Hay mucho en este disco de homenaje a la música que la atrapó a la tierna edad de 12 años, y es difícil permanecer impasible ante canciones como ‘Rock’n’roll heart’, alusión al “chico de clase trabajadora en una ciudad derrotada” que pudo dar sentido a su vida gracias a una guitarra. Y cuando dice que, si tienes “un corazón de rock’n’roll”, entonces “ya no tienes que ser tan astuto / ni tienes que ser una obra de arte”, porque transmitir emociones puede estar al alcance de cualquiera. La arropan ahí las voces de Bruce Springsteen y Patti Scialfa, como en otro número remarcable, ‘New York comeback’.

Williams canta con melancolía a las tonadas (ajenas) de su vida en ‘Jukebox’ (con el dulce eco de Angel Olsen como segunda voz) y convierte a la canción en un personaje poético en ‘Where the song will find me’. Invoca a dos amigos perdidos, Tom Petty en ‘Stolen moments’ y Bob Stinson (de The Replacements) en ‘Hum’s liquor’. Buscando el cuerpo a cuerpo del rock, dejando reposar los medios tiempos, atenta en ocasiones a la fibra acústica y la pincelada de ‘pedal steel’, y todo ello con doctos acompañantes: el batería ‘heartbreaker’ Steve Ferrone; el teclista Reese Wynans (que fue miembro de los Double Trouble de Stevie Ray Vaughan) o el malogrado Steve Mackey, bajista de Pulp (y de Dolly Parton).

Y como colofón, ese ‘Never gonna fade away’ en el que se la ve cara a cara con la depresión y parafrasea a Neil Young: “nunca me desvaneceré”, nos repite, fundiéndose con su oficio y con la canción misma, y deslizándonos una lección de vida. Jordi Bianciotto

Otros discos de la semana

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Triángulo de Amor Bizarro 

 Mushroom Pillow

 Rock

★★★★ 

Después de rendir homenaje a New Order en esa estupenda (y algo perversa) pieza inaugural llamada 'Estrella solitaria', el cuarteto gallego reafirma su condición de mascarón de proa del noise rock ibérico con una docena de canciones ricas en constrastes (a la producción, el inefable Carlos Hernández) que basculan entre la épica y la rabia, entre My Bloody Valentine y Primal Scream, para hablar de asuntos como el precio del éxito y las presiones de la industria. Rafael Tapounet

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Lloyd Cole 

 Edel / Earmusic

 Pop-electrónica

★★★★ 

El autor de aquella perla ochentera (no siempre mencionada) llamada ‘Rattlesnakes’ ha alcanzado la síntesis de su arte de la canción fundiendo las inquietudes electrónicas de madurez y el instinto melódico del trovador pop. Como en ‘Guesswork’ (2017), toca la fibra valiéndose de guitarras y sintetizadores, arropado por dos exCommotions (Blair Cowan y Neil Clark). Atención a temas como ‘The idiot’, exponente de una robótica emotiva con vistas al Berlín de Bowie e Iggy. J. B.

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Meshell Ndegeocello 

 Blue Note

 Pop

★★★ 

“He dicho cosas que no creía, he hecho cosas sin ser yo misma”, canta Meshell Ndegeocello en la emotiva 'Gatsby'. ¿Es 'The Omnichord Real Book' el disco más confesional de una autora que se ha distinguido por ir siempre a pecho descubierto? Una vez más, Ndegeocello hurga con honestidad por dentro -identidad, heridas- pero también por fuera : 'Virgo' es puro afrofuturismo. El abanico de colaboraciones, del pianista de jazz Jason Moran a la cantante Joan As a Policewoman, añade variedad a un vergel de músicas riquísimas en texturas y ritmos. Roger Roca