La escudería Renault ha sido suspendida por dos años de la Fórmula 1, exentos de cumplimiento, por el accidente voluntario en el pasado Gran Premio de Singapur de su piloto Nelson Piquet, mientras que Flavio Briatore ha sido apartado de por vida de la competición, informó ayer la FIA.

El ex estratega del equipo Pat Symonds fue apartado durante cinco años, mientras que los dos pilotos implicados, Piquet y Fernando Alonso, que se benefició del incidente, fueron absueltos.

El Consejo Mundial de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) se mostró clemente con la escudería francesa, pese a considerarla culpable del incidente, y cargó con dureza contra su anterior responsable, el italiano Flavio Briatore, y contra Pat Symonds, ingeniero jefe.

Ambos dirigentes habían sido apartados la semana pasada del equipo por Renault, que anunció que no contestaría las alegaciones de la FIA en este caso.

La FIA consideró de una "extrema gravedad" el accidente voluntario de Piquet, que no perjudicó sólo a la imagen del deporte, sino que también puso en peligro la vida de los espectadores, oficiales, el resto de los competidores y el propio Piquet.

Ante ello, el Consejo Mundial se planteó la descalificación de Renault, pero tuvo en cuenta la cooperación de la escudería para aclarar los hechos e identificar a los responsables individuales de los mismos -Briatore y Symonds-, por lo que limitó la sanción.

Esta durará hasta 2011 y quedará en suspenso mientras el equipo no cometa una pena comparable durante ese periodo.

Renault deberá pagar los gastos de la investigación y se comprometió a hacer una contribución a los trabajos de seguridad de la FIA.

La Federación Internacional agradeció a Fernando Alonso su colaboración en el caso y concluyó que el piloto español no estaba envuelto de ninguna forma en la maquinación de su equipo.

Tampoco sancionó a Nelsinho Piquet, que se benefició de la inmunidad a cambio de su confesión.

Todo lo contrario que el ex responsable del equipo Flavio Briatore y el anterior estratega del mismo Pat Symonds, a los que consideró cerebros del caso y los apartó de la Fórmula 1.

El primero fue suspendido "de por vida" de la competición, al tiempo que le negaron las funciones de representante de pilotos, lo que obligará a Alonso a buscarse otro agente en el futuro para gestionar sus intereses deportivos.

Symonds, por su parte, fue suspendido sólo durante cinco años, al tener en cuenta la FIA que el anterior estratega de Renault admitió haber participado en la maquinación y pidió perdón por ello.

Ni Briatore ni Symonds estuvieron presentes en la audición celebrada ayer en París, en la que Renault estuvo representado por Fernando Alonso y por el presidente de la escudería, Bernard Rey.

Los expertos presentes en París interpretaron la sanción impuesta a la marca francesa como una muestra de indulgencia de la FIA, después de que Renault anunciara la semana pasada la exclusión de Briatore y de Symonds del equipo.

Renault podía haber sido suspendido de por vida, pero la Fórmula 1 no puede prescindir de participantes en un momento en el que varias escuderías están saliendo de la competición, según el análisis de los expertos.

Además, una dura sanción para la marca francesa hubiera podido impulsar al fabricante de automóviles a abandonar la Fórmula 1 en un momento en el que la marca del rombo atraviesa importantes turbulencias financieras.

Renault sale bien parada de un incidente que tuvo lugar el pasado 28 de septiembre durante la vuelta 14 del Gran Premio de Singapur, cuando Nelsinho Piquet se estrelló contra un muro, lo que obligó a salir al coche de seguridad, una maniobra que benefició a Fernando Alonso, que acabó imponiéndose en la carrera.

El piloto español había repostado poco antes del accidente, por lo que salió beneficiado del parón en la carrera, en detrimento sobre todo del brasileño Felipe Massa (Ferrari), que encabezaba la prueba en ese momento.

El piloto brasileño, apremiado por los nervios, no consiguió acabar aquella competición por culpa de un mal repostaje, mientras que su principal rival para la victoria final en el Mundial, el británico Lewis Hamilton (McLaren), acabó subido al podio.

Hamilton acabó apuntándose ese Mundial con un punto de ventaja sobre Felipe Massa, por lo que muchos observadores consideran que aquel incidente, además de beneficiar a Fernando Alonso, pudo haber privado a Massa y a la escudería Ferrari del título mundial, que tenía ya su piloto Raikkonen.