Di María centra, Ronaldo marca y el Madrid despega. Hacen falta más ingredientes, pero ésta es la sustancia de la receta que, cocinada a fuego intenso, da como resultado el asombroso juego ofensivo del Madrid. El conjunto de José Mourinho, que está firmando el mejor arranque goleador de su laureada historia, va camino de hacer saltar todos los registros. Ronaldo nunca olvidará 2011, el mejor año natural de toda su carrera como futbolista profesional. Y Di María va camino de convertirse en un extremo de leyenda. En sólo dos años en el Madrid ha repartido ya 29 pases de gol. Si al guiso se le añade un mucho de Casillas y Xabi Alonso, la pegada de Higuaín y Benzemá, el talento de Özil y la solidez de una defensa mucho más firme, el resultado es un blanco perfecto.
El conjunto de Mourinho llega a El Molinón, un feudo poco propicio para ellos, como líder sólido del campeonato, tras haber sumado 34 de los 39 puntos disputados y con una renta de seis sobre un equipo de leyenda, como es el Barcelona de Guardiola. El Madrid de hoy es una versión mejorada del equipo que ya se intuía en la campaña anterior. Su secreto reside en su terrible eficacia en las dos áreas. Especialmente en la contraria. En los trece primeros partidos de Liga, el Madrid ha marcado ya 46 tantos, para un espectacular promedio que supera los 3,5 goles por partido.
Es el mejor inicio goleador del conjunto blanco en toda su historia. Hasta ahora, el arranque más certero había sido el de la campaña 1950-51, en la que los blancos marcaron 44 goles en los trece primeros partidos, uno más que en la temporada 1959-60. El matiz está en Casillas. El Madrid de hoy no descuida la defensa y por eso sólo ha recibido diez goles en la Liga, con lo que tiene un coeficiente de +36. En la temporada 1950-51 los blancos habían recibido 38 goles y el saldo favorable era solo de 8 tantos.
Aunque hay otros delanteros, el gol en el Madrid lleva la firma de Cristiano Ronaldo. El portugués ha explotado desde su llegada al club blanco. 2011, tomado como año natural, deja su mejor registro con 48 goles (tres más que en 2010) y todavía le queda diciembre.
Mucha culpa de los números de Ronaldo, y del Madrid en general, la tiene Ángel Di María. El argentino le ha dado ya 8 pases de gol al portugués y 29 al conjunto de sus compañeros en las dos temporadas que lleva en el Bernabéu. En lo que va de Liga, 9 jugadas suyas acabaron en gol.
Este Madrid temible comenzó ayer a preparar su visita al estadio del Sporting, un anfitrión poco hospitalario. La principal noticia en la sesión de trabajo blanca estuvo en la ausencia de Cristiano Ronaldo. El portugués sufre un esguince de grado I y una contusión en el tobillo izquierdo. Su presencia en El Molinón queda en duda, aunque el de Madeira no es de los que se borran de una buena batalla. La noticia positiva para Mourinho es que Kaká y Arbeloa se han sumado a los entrenamientos con el grupo.
Los problemas en su tobillo son las secuelas del partido ante el Atlético, cuya herida no se ha cerrado. Ronaldo coincidió con el presidente colchonero, Enrique Cerezo, en la gala del periódico As. No se saludaron, pero se mandaron mensajes. "Vosotros también pegáis. Pepe, Carvalho y el bajito ese con mucho pelo... el Marcelo ese", le espetó Cerezo al delantero del Madrid. La réplica fue inmediata: "Estás hablando de los mejores del mundo". Ronaldo también le reprochó que "aún quedan réditos de las patadas", en referencia a las consecuencias de la dura entrada que le hizo Perea en el partido y que le ha provocado la lesión que le ha impedido entrenarse.
